Los Directores de la Gaceta de Bellas Artes de la AEPE: Emilio Romero Barrero

Por Mª Dolores Barreda Pérez

 

Los Directores de la Gaceta de Bellas Artes

de la Asociación Española de Pintores y Escultores

La Gaceta de Bellas Artes: 1930

Como veíamos en anteriores números, la Gaceta de Bellas Artes estaba regida por un comité de redacción en el que figuraba el secretario, y en el que Roberto Fernández Balbuena ejercía de director, figurando también en dicho comité José Subirá, redactor de temas musicales, y Enrique Estévez Ortega.

En el número de julio del año 2021 ya abordamos la biografía de Roberto Fernández Balbuena, y en los pasados meses de mayo y junio, las de José Subirá y Enrique Estévez Ortega.

La Gaceta de Bellas Artes dio un profundo cambio adaptándose al estilo de otras revistas ilustradas de la época, teniendo a partir del mes de mayo de 1931, periodicidad mensual. Hubo un intento de crear una nueva revista cuya dirección y comité de redacción suscribía la directiva, a las órdenes de su presidente, Julio Moisés y Enrique Estévez Ortega como redactor jefe.

En 1930 el comité de redacción estaba integrado por:

     Antonio Ortiz Echagüe, en aquellos momentos el Presidente de la AEPE,

     Jesús María Perdigón, de quien dimos cuenta ya en esta misma Gaceta de Bellas Artes en el mes de marzo pasado,

     Ángel Vegué Goldoni, a quien conocimos en la Gaceta de abril,

     Ramón Pulido, cuya biografía publicamos el mes de junio de 2022,

     Ricardo Baroja, que ocupó las páginas de la Gaceta de julio de 2023,

     Francisco Esteve Botey, de quien ya tratamos en noviembre de 2020,

     Roberto Fernández Balbuena, cuya biografía abordamos en la sección de las Medallas de la AEPE,

     José Subirá, que descubrimos el pasado mes de mayo de 2023 y

     Pedro García Camio, Secretario de la AEPE, a quien tratamos en la Gaceta de diciembre de 2022, y Emilio Romero Barrero, protagonista de este mes.

 

Emilio Romero Barrero

 

ROMERO BARRERO, Emilio        P       1928       oct.1895     S. FERNANDO      MADRID         1965

 

Socio de Mérito

Socio de Honor

Secretario de la AEPE

 

Emilio Romero Barrero en la Gaceta de Bellas Artes, 1955

 

Emilio Romero Barrero nació en octubre de 1890, en San Fernando, Cádiz.

Hijo del arquitecto gaditano José Romero Barrero, profesor numerario interino de la Escuela Superior de Artes e Industria y Bellas Artes de Cádiz. Arquitecto provincial en 1908, con domicilio en la calle Cobos, 6. Académico de número de la Real Academia Hispanoamericana de Ciencias y Artes en 1914, en 1916 logró la plaza de Arquitecto municipal de Cádiz.

Describían a su padre como un hombre de singular afabilidad y exquisito trato social, caballeroso culto, querido y respetado por sus prestigios personales. Siempre dio pruebas de su capacidad profesional y de su nada vulgar temperamento, revelando su valioso caudal de conocimientos de arte y ciencia arquitectónico. De agradable y correcto trato personal, miembro de la alta sociedad gaditana, sus trabajos particulares y profesionales hicieron que alcanzara un prestigio personal envidiable.

En este ambiente culto y propenso a las ciencias y las bellas artes, Emilio, que tenía una hermana llamada Concepción, se decantó por la carrera de medicina, que ejerció y compaginó con la pintura toda su vida.

En 1916 realizó la tesis doctoral que versó sobre “El pneumotorax artificial en el tratamiento de la tuberculosis pulmonar” y que leyó en la Universidad Complutense de Madrid.

En 1917 en Cádiz, el doctor Emilio Romero Barrero ofrecía al Ayuntamiento gaditano su Gabinete antirrábico, donde “sin necesidad de trasladarse a otra capital, pueden obtener su curación los individuos pobres mordidos por perros, cuyas curaciones satisface el municipio”.

A lo largo del año 1918, El correo de Cádiz publicaba un anuncio en el que el Dr. Emilio Romero Barrero, atendía la “Vacunación antirrábica, por el método supraintensivo, y Enfermedades del aparato respiratorio, San Pedro, 16, de 3 a 5. Cádiz”.

Anuncio de El correo de Cádiz del año  1918

 

Simultáneamente, de 1919 a 1923 realizó estudios de escultura en la Escuela de Artes y Oficios Artísticos de Cádiz.

En 1920 era ayudante de Cátedra de la Facultad de Medicina en Cádiz.

En 1923 se traslada a vivir definitivamente a Madrid, instalándose como médico y ejerciendo su carrera profesional a lo largo de su vida, en el Hospital Central de la Cruz Roja y en el Instituto Español de Hematología y Hemoterapia.

En Madrid estudió también pintura con los socios de la AEPE Federico Godoy de Castro, Socio Fundador de la AEPE, gaditano como él y repetidamente laureado, más tarde con Julio Romero de Torres y finalmente con el que fuera Presidente de la AEPE, Julio Moisés.

Además, llegó a ser profesor auxiliar en la Escuela de Artes de Madrid.

Casado en 1917 con Elena González de Peredo, el matrimonio tuvo tres hijos: Emilio, Carlos y Alfonso, y residían en la calle Recoletos, 10, y más tarde en la calle Narváez, 11, donde mantenía una consulta médica privada.

Araceli, del X Salón de Otoño

Bodegón, del XXIV Salón de Otoño

 

En 1927 participó en el II Salón de Médicos Artistas celebrado en el Círculo de Bellas Artes de Madrid, donde destacó con sus obras, así como en la edición de aquel año del Salón de Otoño.

Para el homenaje al Ministro de Marina, que tuvo lugar en 1928, y en el que se le entrega un álbum en cuero repujado obra de Ramón Martín de la Arena, realizó unas “hojas tan bellamente iluminadas con preciosas miniaturas alegóricas”, como recogía la prensa del momento, “debidas al pincel del inspirado artista Emilio Romero Barrero”.

Maximina

Paquita, del XII Salón de Otoñoc

La margarita, del XVIII Salón de Otoño

Muchacha con jarra, del XXII Salón de Otoño

 

Para 1930 ya era reconocido como un excelente pintor, recogiendo la Crónica de Arte del X Salón de Otoño, firmada por Luis León Domínguez, que  …“Emilio Romero Barrero, tres notabilísimos óleos: una figura de mujer, Araceli, y dos bodegones, magistralmente interpretados”, publicándose además una fotografía de uno de sus bodegones.

Fotos de sus obras aparecen a partir de entonces en algunos medios, con motivo de su participación en el Salón de Otoño y en la Exposición Nacional de Bellas Artes de 1932… donde se destaca que “Emilio Romero Barrero interpreta muy bien los tipos de sus dos obras Una gallega y Carmen”.

Josefina, ABC, 1933

 

En 1932, la Revista hispanoamericana de ciencias, letras y artes publica un reportaje del artista, junto a tres fotografías de sus obras, en el que destaca que “Allá por el año 1923 llegó a Madrid un ilustre doctor en Medicina con el bagaje de su ciencia humanitaria y el ideal espiritual de un gran amor y entusiasmo por el Arte de la pintura. Emilio Romero Barrero, a quien aludimos, con los preliminares estudios plásticos iniciados en su patria andaluza, Cádiz, y al lado de Federico Godoy, al llegar a la capital de España empezó a recorrer la áspera senda de la conquista de un nombre artístico simultaneando este deseo con su noble actividad de mitigar el dolor ajeno. Años después, … se vio que aparecía en el movimiento espiritual estético un valor nuevo de indiscutible importancia. A partir de entonces, el nombre del ilustres doctor en Ciencias, … simultanea ambas actividades, y si bien es verdad que en la primera goza de un destacado lugar, en la segunda su prestigio artístico se parangonea en idéntica trayectoria.

Muchos éxitos y laureles ha conquistado el notable pintor andaluz. En Madrid, primero, al lado del llorado Romero de Torres, y posteriormente con el ilustre maestro y gran retratista Julio Moisés, con quien le unía fraternal amistad, ha llegado Romero Barrero a hacer destacar su labor pictórica, consiguiendo por su indiscutible talento situarse en el plano más importante de nuestra dinámica espiritual contemporánea. Este talento indiscutido, la simpatía personal, la actividad incansable del joven artista gaditano, hicieron el que la Asociación de Pintores y Escultores, hallando en justicia en él un elemento de suma importancia para un desarrollo y progreso en la marcha del organismo, lo estime como un insustituible secretario de su directiva, del que por su amor a la profesión y por su interés en el noble deseo de mejoramiento, la entidad va desarrollándose en movimiento de superación.

En cuanto a la característica de la labor pictórica de Romero Barrero… Los lienzos y superficies en donde los problemas se desenvuelven acusan en primer término, una honradez interpretativa poco común en estos tiempos. Los temas, compuestos con gran sencillez y buen gusto, estudiados con la conciencia en la propia estimación, dibujadas sus formas sin escamoteos engañadores y resueltos con un gran cromatismo realista, imprimen a la labor en conjunto de Romero Barrero el carácter de su temperamento equilibrado y al margen de todo prejuicio. Una marcada preferencia se observa también por los motivos femeninos, cualidad que contribuye lógicamente a su mayor simpatía.

Sus figuras de mujer inspiran al observador un sugestivo encanto, por el buen gusto de que se halla dotado el artista que las concibe, y de ahí la belleza integrada en cada una de las obras cuando principalmente la protagonista del cuadro es representada por una efigie femenina. Romero Barrero siente, además, intuitiva inclinación por asuntos de otra especie: bodegones y naturalezas muertas. Estos motivos son plasmados por el notable pintor con singular gallardía. Dotando a los estudios de grandes dimensiones y componiendo los accesorios con sabiduría realista, los elementos que los constituyen se hallan saturados de una gracia peculiar que los hacen excepcionales entre el núcleo de sus similares. Estos motivos tan llenos siempre de dificultades y de cuyo género Romero Barrero es uno de los más destacados maestros pueden, sin hipérbole, calificarse como de bellísimos y en los que, repetimos, la técnica se halla en ellas especifica con superlativa calidad… en un relativo corto espacio de tiempo la firma de Romero Barrero se incorpore a la de los positivos valores de nuestro arte actual… títulos de algunas de sus telas más destacadas.

Gaditana, lienzo representativo de su gentileza de una bella mujer andaluza, admirablemente dibujada y resuelto su colorido con la más plausible sencillez. Naturaleza en silencio, óleo en el cual las calidades de los elementos que lo integran acusan la honradez de un escrupuloso estudio. Carmen, cuya media figura es retrato perfecto de la gentil modelo, resuelto en una gama de tonos claros y armónicos. Madrileña y Rosarillo (este último se exhibe en el actual Salón de Otoño), telas similares en calidad técnica a los anteriores, y… para no ser excesivamente prolijo en citas, señalaremos, finalmente, el bodegón de grandes dimensiones denominado La bombona verde, en el cual, como en otros muchos, el problema difícil y complejo de los diversos valores y calidades e interpretación de los vidrios y cristales se hallan logrados con verdadera maestría y dominio del oficio, y que confirman plenamente las envidiables cualidades del gran artista del que hoy ocupa nuestra atención: el ilustre médico, pintor y secretario Socio de Honor de la Asociación de Pintores y Escultores, Emilio Romero Barrero”. E.N.

Gallega, del XI Salón de Otoño

Bodegón, del X Salón de Otoño

 

Un año muy fructífero el de 1932, ya que en el III Salón de Médicos Artistas celebrado en el Museo de Arte Moderno de Madrid, la prensa vuelve a destacar que  …“En la sección de pintura, la más nutrida y, desde luego, la más dotada de logros laudables, reencontramos, por ejemplo, a Emilio Romero Barrero, con el excelente retrato femenino Carmen, y varios bodegones y naturalezas en silencio de buena calidad y brillantez ya estimadas en Exposiciones del Estado y de la Asociación de Pintores y Escultores”.

En 1933 su logrado reconocimiento artístico le llevó a ser nombrado jurado del XIII Salón de Otoño.

En 1933, y tal y como publica La Libertad, su casa, situada en la calle Narváez, 8, fue “víctima de un robo en el que violentando la puerta de entrada con una palanqueta, se llevaron objetos, alhajas y monedas de oro por un valor total de 6.500 pesetas”.

Presentó obra a la Exposición Nacional de Bellas Artes de 1934, que fue reconocida por la prensa, que destacó que “la figura de mujer de Romero Barrero, llena de garbo y gracia, y en la que el notable pintor no desdeice de la buena escuela de su maestro Julio Moisés”.

Camerino, del XXV Salón de Otoño

Nati, del XI Salón de Otoño

 

En 1935 su obra formaba parte de una exposición de obras de artistas andaluces realizada en el Liceo Andaluz, dirigida y comisariada por José Prados López, en la que participaron otros miembros de la AEPE como Gonzalo Bilbao, Amparo González Figueroa, Vázquez Díaz, Francisco Soria Aedo, López Mezquita, Moreno Carbonero, Julio Moisés, Pedro Antonio, Rafael Botí, Coullaut Valera, Blanco Coris…

En 1945 participó en la Exposición de Bellas Artes celebrada en el Palacio de la Lonja de Palma de Mallorca, organizada por la Asociación de Pintores y Escultores.

En 1950 obtiene la Tercera Medalla en la Exposición de Médicos Pintores celebrada en Elche, y dos años más tarde participa en la Exposición de Médicos Pintores de la Facultad de Medicina de Madrid.

En unas líneas publicadas en el diario Pueblo, él mismo se define como “pintor de figura y retrato”.

Eugenia, del XXV Salón de Otoño

 Bodegón, del X Salón de Otoño

 

Ponente del I Congreso Médico Nacional de la Cruz Roja de 1959, con el título de “Rehabilitación y recuperación de inválidos”.

Condecorado con la Medalla de Plata y la Medalla de Oro de la Cruz Roja Española, Medalla de Oro del Centenario de las Cortes de Cádiz, fue académico correspondiente de las Reales Academias Hispanoamericana de Ciencias y Artes de Cádiz y de la Real Academia de Medicina.

Falleció el 13 de octubre de 1965 en Madrid, a los 75 años.

La bombona verde

Carmen, del XI Salón de Otoño

 

Emilio Romero Barrero y la AEPE

Asociado en 1928, en 1930 fue nombrado médico oficial de la AEPE, ofreciendo sus servicios con tarifas reducidas un 25% a los socios de la entidad.

Cuando en 1929 la AEPE inauguró la Sala de Exposiciones propia, participó en la exposición colectiva organizada a tal efecto.

En 1930 fue Socio de Mérito del Salón de Otoño, logrando un año después, el título de Socio de Honor, que repetiría en 1952, con motivo del XXV Salón de Otoño.

Elegido Secretario de la AEPE el 31 de marzo de 1930, ocupó ese cargo hasta 1934.

En 1933 fue el encargado de leer el manifiesto que sobre la Federación de Artistas presentó la AEPE en el Círculo de Bellas Artes de Madrid, formando también parte del comité para estudios del Reglamento, creado a tal efecto.

Ese mismo año ejerció de Secretario del jurado del XIII Salón de Otoño.

En 1936 fue elegido Vicesecretario, puesto en el que repitió de 1939 a 1943.

En el Salón de Otoño de 1950 obtuvo la Tercera Medalla de Pintura, logrando la Segunda Medalla en el Salón de 1952 y finalmente la Primera Medalla, en el Salón de 1955.

De él escribió el crítico y Secretario de la AEPE, José Prados López: “Mitad poeta, mitad filósofo, sabe cantar y ocultar sus penas y sus contentos”

Participó en las siguientes ediciones del Salón de Otoño:

VII Salón de Otoño de 1927: 568.- Retrato de la Srta. De Núñez; 569.- Bodegón.

VIII Salón de Otoño de 1928: 230.- Retrato de la Srta. María García, óleo, 1,01 x 0,81.

IX Salón de Otoño de 1929: 167.- Gaditana, óleo, 1,16 x 1,00.

X Salón de Otoño de 1930: 240.- Bodegón, óleo, 0,70 x 0,84; 241.- Bodegón, óleo, 0,71 x 0,92; 242.- Araceli, óleo, 0,80 x 0,69.

XI Salón de Otoño de 1931: 245.- Maximina, óleo, 0,87 x 0,77; 41 bis.- Gallega, óleo, 0,94 x 0,76; 43.- Carmen, óleo, 0,94 x 0,77; 56.- Nati, óleo, 0,53 x 0,46.

XII Salón de Otoño de 1932: 80.- Rosarillo, óleo, 1,08 x 0,88; 84.- Paquita, óleo, 1,08 x 0,88.

XIII Salón de Otoño de 1933: 32.- Josefina, óleo.

XV Salón de Otoño de 1935: 24.- Retrato de D. Santiago Ramón y Cajal, óleo.

XVI Salón de Otoño de 1942: 17.- Reposo, óleo.

XVIII Salón de Otoño de 1944: 84.- La margarita, óleo; 86.- Bodegón, óleo.

XXI Salón de Otoño de 1947: 56.- La niña del gallo, óleo.

XXII Salón de Otoño de 1948: 223.- La guitarra; 86.- Mujer del jarro; 90.- El mantoncillo.

XXIII Salón de Otoño de 1949: 126.- Sole.

XXIV Salón de Otoño de 1950: 20.- Zagala, óleo; 21.- Bodegón, óleo.

XXV Salón de Otoño de 1952: 79.-Camerino, óleo; 80.- Eugenia, óleo; 86.- Amalia, óleo.

XXVI Salón de Otoño de 1954: 77.- Mantilla negra.

XXVII Salón de Otoño de 1955: 87.- Toledana, óleo.

XXIX Salón de Otoño de 1957: 113.- Bodegón, óleo; 114.- Figura, óleo.

XXXV Salón de Otoño de 1964: 172.- Figura, óleo; 173.- Maternidad gitana, óleo.

La guitarra, del XXII Salón de Otoño

Gaditana

Retrato de la Srta. María García, del VIII Salón de Otoño

Fotografía aparecida en el diario Pueblo, 1950

Rosarillo

Zagala, del XXVI Salón de Otoño

El cántaro, del XII Salón de Otoño

Sole, del XXIII Salón de Otoño

Isabel Pastor Bourgon

Por Mª Dolores Barreda Pérez

 

LAS PRIMERAS ARTISTAS DE LA

ASOCIACION ESPAÑOLA DE PINTORES Y ESCULTORES

Desde su fundación en 1910, y después de haber tratado en anteriores números a las Socias Fundadoras de la entidad, y las participantes en el primer Salón de Otoño, vamos a ir recuperando de la memoria colectiva, el nombre de las primeras socias que vinieron a formar parte de la Asociación de Pintores y Escultores.

Isabel Pastor Bourgon

PASTOR BOURGON, Isabel          P.E.AD 1928           MADRID           MADRID

Isabel Pastor fotografiada en 1930, Estampa

 

Isabel Pastor Bourgon nació en Madrid, en 1911.

Su hermano Pablo, socio también de la AEPE y artista, se decantó por el grabado y falleció el 28 de noviembre de 1988 en Madrid.

Su vocación por la escultura comenzó casi como un juego. Sus padres tutelaron la formación de los hermanos en casa, teniendo un profesor de dibujo que además era escultor.

Isabel comenzó manejando los lápices, pero viendo a su maestro trabajar en el barro en una cabeza, despertó su vocación, dejando a un lado la pintura, que no la atraía, mientras que modeló una cabeza de niño, copia de una figurilla de su madre, que fue muy bien acogida por el maestro y la familia.

Con toda la ilusión puesta en la escultura, se sucedieron después las figuras, en un camino en el que ella misma declaró, “siguió sin vacilar”.

Camila, obra que presentó al VIII Salón de Otoño

 

Su formación incluyó la musical, reconociendo que “toco el piano pero no le dedico las horas que debería… me consuelo escuchando a Beethoven”…

 

Blando y Negro publicaba en 1922 esta fotografía de la artista

 

En 1920 colaboraba con la revista Voluntad, donde escribía artículos acerca de las labores femeninas, que acompañaba de interesantes fotografías.

En 1922 apareció una fotografía suya en la revista Blanco y Negro, al pie de la cual se leía: “La señorita Isabel Pastor, que a sus encantos femeninos une su gran disposición para las bellas artes”.

En 1927 ya presentó dos retratos esculpidos al VII Salón de Otoño.

En 1928, con motivo del VIII Salón de Otoño, el ABC reproducía una fotografía de su escultura titulada “Camila”.

Vivía por aquel entonces en la calle Velázquez, 30, 3º de Madrid.

Anacoreta, con la que concurrió al XII Salón de Otoño

 

Al IX Salón de Otoño de 1929 presentó también la obra Ondina.

En 1930 participó en la Exposición Nacional de Bellas Artes, encontrándonos distintas fotografías de su obra “Galatea” en diarios como el ABC y la revista Blanco y Negro. Las críticas comentaban que la joven escultora …”envió una obra de considerable empuje dadas las circunstancias de sexo y juventud de la artista. Galatea es el tema interpretado. La ninfa mitológica aparece encarnada en gracioso desnudo femenino”… y también que …”En retrato de D.J.M.B., de la señorita Isabel Pastor Bourgón, se anuncia claramente la posibilidad de una escultora”…

También en 1930 concurrió al X Salón de Otoño con la obra Retrato de D.J.M.B. y al de 1931, con la obra Serenidad.

La Libertad, 1932

 

En 1932 el periódico La Libertad publica una entrevista que incluye una fotografía de la escultora, bajo la sección de “Las mujeres en la república”, con el título de “Isabel Pastor-Bourgon o el Arte”. La entrevista la firma Blanca Silveira-Armesto, nos relata que …”estamos en su estudio, rinconcito de arte, grato y amable… los muebles son de una sencillez y gusto insuperables. Libros en las estanterías; sobre el “secretaire”… Figuras, maravillosas de línea, en los rincones… Luego, separado por pesados cortinajes, el lugar donde trabaja. Cabezas, torsos, figurillas aladas, y por último, como expresión de un arte de depurada exaltación, un Cristo de tamaño natural, muestra, en sus miembros atirantados por el martirio, en toda su figura esbelta, un reflejo acabado del Hombre que agonizó en el Gólgota. No es un Cristo de líneas suaves…no. En este parece reconcentrarse la agonía desesperada de una infinita incomprensión. Tiene una fuerza poderosa de dolor el torso que refleja la tragedia… y una expresión de dulce piedad y amor el rostro dolorido…

Fotografía de Galatea publicada por Blanco y Negro en 1930

 

Incluye también una descripción de la escultora: …”rostro de líneas fuertes con un gesto duro y sensual, reflejo interior de una pasión intensa, y los músculos, vigorosos muestran todo el poder de una energía indómita…esta artista de apenas veinte años… de dedos finos y pálidos… de formación clásica, pero con un matiz moderno y fuerte. Siente fervor por Miguel Ángel, Berruguete y Victorio Macho, de quien es discípula”…

Y otro tipo de datos como …”En la pintura me gustan el Greco, Velázquez y Rubens, Zuloaga, Solana y Mezquita. Me gusta Shakespeare, Merimée, René Razin, Pierre Lotti y otros… y mi devoción por Benavente y Calderón, Valle Inclán, Galdós y Pío Baroja. Me gustan Rubén Darío y Enrique de Mesa, Bécquer y Espronceda.

Soy republicana de todo corazón; pero más afín con Unamuno, a quien tanto admiro como pensador y literato, que con el Gobierno actual, tan tocado de partidismo.

El arte es un ideal que nos envuelve por entero… Nos vence, a veces, dejándonos rotos en el camino; pero otras nos conduce hasta el fin… Y con esta esperanza, luchando por llegar, nuestras horas ya no son vacías. Están llenas de vibraciones, de goces purísimos al ir venciendo a la forma que se rebela muchas veces entre los dedos que la modelan”…

Descendimiento, con la que concurrió al XV Salón de Otoño

Ondina, presentada al IX Salón de Otoño

 

Concurrió además al Salón de Otoño de 1932 y 1933, y al de 1934, presentó el bronce titulado “Mater Salvatori”, que a decir de Hesperia, en el diario La Época, es “de línea fina e inclinación del XVIII, aunque más moderna en la manera de obtener los pliegues de la túnica, con gran sencillez, pero sin rigidez alguna, que permite la flexibilidad necesaria para ceñirlos a la figura de gran esbeltez”.

Serenidad, presentada al XI Salón de Otoño

Retrato, del VII Salón de Otoño

 

Presente también en el Salón de 1935, nada sabemos de su periplo antes, durante y después de la guerra civil.

En 1945 participó en el I Salón de Primavera de Palma de Mallorca que organizó en aquella isla la Asociación Española de Pintores y Escultores, estando compuesta la Junta Organizadora por Eduardo Chicharro, José Prados López, Emilio Pou y González-Mor y Tomás Vila y Mayol.

En 1946 la artista presentó el bronce El Cristo del Milagro, en la sede de la Asociación de Pintores y Escultores, antes de que fuera trasladada a su emplazamiento final en la iglesia parroquial de la Concepción. En el acto estuvieron presentes Mariano Benlliure, Aniceto Marinas, Eduardo Chicharro, Prieto Nespereira, Luis Mosquera, Coullaut Valera, Jacinto Higueras y José Prados López, además de otros artistas y críticos de arte que pudieron contemplar una obra que mereció grandes elogios y que alcanzó distintas reseñas en la prensa del momento.

A partir de 1946, alterna la escultura con la pintura.

En los años sesenta, Isabel Pastor era reconocida como una de los tres únicos discípulos que había tenido el escultor Victorio Macho, junto a Abrahán Cárdenes y Castelo Macho, sobrino del artista.

A partir de esa fecha, se pierde su pista.

Retrato, del VII Salón de Otoño

Esclavo, del XII Salón de Otoño

 

Isabel Pastor y la AEPE

Socia de Mérito del Salón de Otoño de 1931.

Al VII Salón de Otoño de 1927 presentó las obras

500.- Retrato, escayola

501.- Retrato, escayola

Al VIII Salón de Otoño de 1928 presentó:

319.- Camila, escayola

Al IX Salón de Otoño de 1929

234.- Ondina, escayola patinada en bronce y piedra

Al X Salón de Otoño de 1930

305.- Retrato de D.J.M.B. escayola patinada

Al XI Salón de Otoño de 1931

573.- Serenidad, escayola

Al XII Salón de Otoño de 1932

327.- Esclavo, escayola

328.- Anacoreta, escayola patinada

Al XIII Salón de Otoño de 1933

384.- Seguro de automóviles

Al XV Salón de Otoño de 1935

376.- Descendimiento, escayola patinada

Al XXI Salón de Otoño de 1947

7.- Victoria, galvanoplastia

Al XXV Salón de Otoño de 1952

508.- Niño Jesús, madera

373.- Estudio, óleo

473.- Bodegón, óleo

Al XXIX Salón de Otoño de 1957

484.- Estudio, óleo.

486.- Ego sum, óleo.

Camila, en ABC, 1928

 

Algunas de las colaboraciones de Isabel Pastor en la revista Voluntad, 1920

 

Convocado el 59 Premio Reina Sofía de Pintura y Escultura

La exposición de obras se celebrará del 29 de febrero al

31 de marzo de 2024, en la Casa de Vacas del Retiro

 

La Asociación Española de Pintores y Escultores ha convocado el 59 Premio Reina Sofía de Pintura y Escultura 2024, de carácter internacional, al que puede presentarse cualquier artista del mundo de las disciplinas de pintura y escultura.

El galardón, que se entrega a una única obra pictórica o escultórica sin que cuente para ello el currículo o la trayectoria del artista, es posible gracias a la inestimable ayuda de Google, que renueva así su confianza en la Asociación Española de Pintores y Escultores.

Con fecha de julio de 2023, el Presidente de la Asociación Española de Pintores y Escultores, José Gabriel Astudillo López, y la Secretaria General de la AEPE, Mª Dolores Barreda Pérez, firman las bases que habrán de regir en la convocatoria del 59 Premio Reina Sofía de Pintura y Escultura, cuya exposición de obra premiada y seleccionadas acogerá como viene siendo tradicional, la madrileña Casa de Vacas del Parque del Buen Retiro, del 29 de febrero al 31 de marzo de 2024.

Como viene siendo habitual, la gala de entrega del Premio contará con la asistencia de S.M. la Reina Doña Sofía, Presidenta de Honor de la Asociación Española de Pintores y Escultores, cuyo apoyo incondicional a la centenaria entidad es motivo de orgullo para la institución que ha cumplido ya 113 años.

El Premio Reina Sofía de Pintura y Escultura es un certamen destinado a promover en España estas dos disciplinas artísticas, mediante la difusión cultural de las obras y el descubrimiento de nuevos talentos.

La incansable labor de fomento de la libertad de creación, la especial dedicación a la protección del patrimonio cultural y el progreso espiritual e intelectual que aporta nuestra institución a la sociedad española a través del arte universal de la creación plástica y la capacidad de generar encuentros artísticos y espacios para el arte en un proyecto absolutamente necesario en la sociedad actual, son la definición del Premio Reina Sofía de Pintura y Escultura que llega a su edición número 59.

El certamen está dotado con 10.000 euros, siendo el único premio internacional de estas características que se concede en el mundo y se ha convertido ya en una referencia indiscutible en el ámbito de las artes plásticas.

“Queremos premiar la creatividad, la pasión por la belleza y el trabajo al servicio de los seres humanos. Queremos que una obra original sea admirada en todo el mundo y que produzca una emoción muy profunda en quienes la contemplan. Y que todo eso sea de la mano de nuestra Asociación Española de Pintores y Escultores”, declara José Gabriel Astudillo, su Presidente.

Y junto a la AEPE, Google quiere, un año más, poner de manifiesto su compromiso con el impulso del arte como medio de expresión y comunicación.

Gracias a la estructura y dinámica abierta de participación, a la transparencia en su desarrollo y a la imparcialidad del jurado, el premio se ha consolidado como uno de los más prestigiosos galardones de nuestro país.

Las  obras  se  presentarán  por  correo  electrónico a administracion@apintoresyescultores.es  hasta el 19 de enero de 2024.

Aquí puedes consultar las bases, pero toda la información la tienes en esta misma web, pestaña «Certámenes y Premios», subpestaña «Premio Reina Sofía».

 

Bases 59 PREMIO REINA SOFÍA DE PINTURA Y ESCULTURA 2024

 

BOLETIN DE INSCRIPCION 2024

 

 

 

59 Premio Reina Sofía de Pintura y Escultura

de la Asociación Española de Pintores y Escultores

29 de febrero a 31 de marzo de 2024

Casa de Vacas

Parque del Buen Retiro de Madrid

Pº de Colombia, 1. 28009 Madrid

De lunes a domingo, de 10 a 21 h.

Metro: Retiro (Línea 2)

Bus: 2, 20, 28

BICIMAD: Estación 102 (C/ Alcalá, 95) y Estación 60 (Plza. Independencia, 6)

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IX Salón de Arte Abstracto 2024

IX Salón de Arte Abstracto

de la Asociación Española de Pintores y Escultores

 

BOLETIN DE INSCRIPCION 2024

 

Bases IX Salón de Arte Abstracto 2024

 

 

IX Salón de Arte Abstracto de la AEPE

Abril de 2024

Salas de Exposiciones «Juana Francés» y «Pablo Serrano»

Junta Municipal de Tetuán

Calle de Bravo Murillo, 357

28020 Madrid

De lunes a viernes de 9 a 14 y de 16 a 19 horas.

Sábados de 10 a 14 horas.

Domingo y festivos cerrado

Metro Valdeacederas (línea 1), Plaza Castilla (líneas 1, 9 y 10)

 

29 de diciembre de 2023

Convocado el IX Salón de Arte Abstracto

Con fecha 29 de diciembre de 2023, el Presidente de la Asociación Española de Pintores y Escultores, José Gabriel Astudillo López, y la Secretaria General de la AEPE, Mª Dolores Barreda Pérez, firman las bases que habrán de regir la convocatoria del IX Salón de Arte Abstracto, que convoca la Asociación Española de Pintores y Escultores, y que se celebrará en las Salas de Exposiciones “Juana Francés” y “Pablo Serrano”, de Tetuán, en abril de 2024.La Asociación Española de Pintores y Escultores  ha convocado la que será la novena edición del Salón de Arte Abstracto al que podrán concurrir todos los artistas residentes en España que lo deseen.

Recordemos que las anteriores ediciones del Salón de Arte Abstracto han cosechado un éxito de crítica y público tremendos y sitúan así a la AEPE en primera fila de los acontecimientos culturales que se desarrollan en toda España, gracias a una calidad insuperable, a una participación entusiasta y a un montaje espectacular en el que tanto los organizadores como los participantes, ganamos en prestigio, arte y maestría.

El Salón de Arte Abstracto se convoca con la idea de sentar las bases para hacer del arte abstracto una fuente de reflexión y de conocimiento que a todos enriquece. En sentido opuesto, la institución convoca el Salón de Arte Realista, con idéntica finalidad y criterios para hacer del arte figurativo o hiperrealista una continua experiencia creadora que aportará todo tipo de conocimientos y la belleza de otra realidad, que sólo en las manos de todos los socios artistas está y que es la antípoda del abstracto y su representación. Los dos Salones se convierten así en inmejorables oportunidades para presentar el talento y la calidad que tienen todos y cada uno de los socios de la Asociación Española de Pintores y Escultores.

Cada autor podrá concurrir al certamen con cuantas obras originales desee, siendo libres el tema y la técnica, haciendo del arte abstracto signo y símbolo, tanto en su capacidad de producir las más variadas emociones como en representar los más increíbles estímulos.

El certamen incluye las secciones de pintura (dibujo, grabado y acuarela) y escultura El tamaño mínimo será de 50 x 50 y el máximo de 150 x 150. Cada obra presentada llevará al respaldo el nombre del autor, domicilio, el título, la técnica empleada y las medidas.

Se otorgarán los siguientes premios: MEDALLA DE PINTURA JOSE MARIA LOPEZ MEZQUITA, dotada con Medalla y Diploma de la AEPE, la MEDALLA DE ESCULTURA ÁNGEL FERRANT Y VÁZQUEZ, dotada con Medalla y Diploma de la AEPE y Distintas MENCIONES DE HONOR, dotadas con Diploma. El Jurado de Calificación podrá conceder las Menciones de Honor que estime convenientes. El jurado, que designará la concesión y orden de los premios, seleccionará las obras para la exposición y estará facultado para dirimir cualquier eventualidad no prevista en las bases, estará formado por expertos de reconocido prestigio.

 

IX Salón de Arte Abstracto de la AEPE

Abril de 2024

Salas de Exposiciones «Juana Francés» y «Pablo Serrano»

Junta Municipal de Tetuán

Calle de Bravo Murillo, 357

28020 Madrid

De lunes a viernes de 9 a 14 y de 16 a 19 horas.

Sábados de 10 a 14 horas.

Domingo y festivos cerrado

Metro Valdeacederas (línea 1), Plaza Castilla (líneas 1, 9 y 10)

 

13 de marzo de 2024

Nuevas fechas para el IX Salón de Arte Abstracto

Prorrogamos el plazo de inscripción

Por motivos ajenos a nuestra entidad nos vemos obligados a modificar la fecha de celebración de la exposición de obras del IX Salón de Arte Abstracto prevista para el próximo mes de abril y que finalmente se celebrará en junio de 2024 en las Salas Juana Francés y Pablo Serrano. Por este motivo, podemos podemos ampliar el plazo de inscripción de obras, lo que altera todas las fechas previstas, que quedarían así:

NUEVAS FECHAS  IX SALÓN DE ARTE ABSTRACTOSalas Juana Francés y Pablo Serrano del Distrito de TetuánJunio de 2024(En las fechas que oportunamente daremos a conocer) Fin del plazo de envío de fotografía y ficha técnica de la obra:hasta el 30 de abril de 2024administracion@apintoresyescultores.esPlazo de presentación de obras seleccionadas: 23 y 24 de mayo de 2024Lugar: Valveart, C/ Dehesa Vieja, 8-Nave 6, Vicálvaro, 28052 – Madridde 9’30 a 14 h. y de 16’30 a 19 h., Plazo de retirada de las obras expuestas: 8 y 9 de julio de 2024,en el mismo lugar y horario de entrega

 

El 6 de septiembre se inaugura el 42 Certamen de Pequeño Formato

En el C.C. Julio Cortázar de Moncloa-Aravaca

El pasado 14 de abril de 2023 publicábamos las bases que habíande regir la convocatoria del 42 Certamen de Pequeño Formato de la AEPE, programado para su realización en el C.C. Moncloa en el mes de octubre. Sin embargo, con motivo de las obras que en todo el edificio se están realizando, logramos reubicar la muestra para su celebración en el C.C. Julio Cortázar, situado en la Calle Antonio Machado, 20, también del distrito de Moncloa-Aravaca, entre los días 6 y 28 de septiembre de 2023.

Este cambio, que nos obligó a desplazar también las fechas de presentación y recogida de obras, para evitar que coincidiera con las vacaciones estivales, no ha hecho mella alguna en la participación de los artistas en la convocatoria, y de esta forma, el próximo día 6 de septiembre de 2023, se llevará a cabo el acto de inauguración de la exposición de obras seleccionadas en el 42 Certamen de Pequeño Formato de la AEPE en el Centro Cultural Julio Cortázar del distrito de Moncloa-Aravaca.

En el transcurso del acto, se entregarán también los premios y distinciones que lleva aparejado el certamen, la la Medalla de Pintura Francisco Pradilla y la Medalla de Escultura Juan Bautista Adsuara, así como las Menciones de Honor que el jurado ha estimado convenientes.

La Asociación Española de Pintores y Escultores ha seleccionado un total de 84 obras, de entre más del centenar presentadas, en un certamen en el que participan reconocidos autores con diferentes estilos y técnicas, pero con una gran calidad.

El Jurado en esta ocasión ha estado formado por José Gabriel Astudillo López, Presidente de la AEPE y Mª Dolores Barreda Pérez, Secretaria General de la AEPE, actuando como Presidente y Secretaria del Jurado, respectivamente, ambos con voz y sin voto; y como Vocales del Jurado, los directivos Juan Manuel López Reina, Alicia Sánchez Carmona, Paloma Casado, Carmen Bonilla Carrasco, Fernando de Marta, Jesús Alcolea y Manuel Díaz Meré.

Al acto de inauguración asistirán el Presidente de la Asociación Española de Pintores y Escultores, José Gabriel Astudillo, el Vicepresidente de la entidad, Juan Manuel López-Reina, la Secretaria General, Mª Dolores Barreda Pérez,  el resto de miembros de la Junta Directiva, además de las autoridades municipales del distrito.

Toda la información sobre este certamen la puedes encontrar en esta misma web, pestaña «Certámenes y Premios», subpestaña «Certamen de Pequeño Formato».

Los artistas seleccionados en esta ocasión para integrar la exposición del 42 Certamen de Pequeño Formato de la AEPE, que permanecerá abierta hasta el día 28 de septiembre, son:

 

42 Certamen de Pequeño Formato 

C.C. Julio Cortázar

Moncloa-Aravaca

Inauguración: 6 de septiembre, 19 h.

Del 6 al 28 de septiembre de 2023

C/ Antonio Machado, 20 – 28035 Madrid

L a V, de 9:30 a 13:30. L a J de 17 a 19 h.

Metro: Valdezarza (línea 7) y Antonio Machado (línea 7)

Bus: 127, 132, 126

CÓDEX 90

Libro conmemorativo del 90 Salón de Otoño

Gratuito y abierto a todos los artistas

El pasado mes de abril de 2023 la AEPE convocaba a todos los artistas, sean o no socios de nuestra institución, a participar en la elaboración del Códex 90, el libro de artista con el que conmemorar la celebración del 90 Salón de Otoño, el certamen artístico más antiguo y prestigioso de los que se convocan en España.

Se trata de realizar una obra original en formato único de 29’7 x 42 cm. (que se corresponde con un A3), a sangre, soporte papel de 240 g. (tipo Guarro) y con temática y técnica libre (óleo, dibujo, acuarela, grabado, carboncillo, pastel, guasch, collage…).

Todas las obras recibidas se guardarán en una caja conmemorativa que conformará el que hemos denominado CÓDEX 90.

Es, en definitiva, una felicitación de los artistas a una histórica muestra por la que han pasado desde su creación más de 30.000 artistas de todo tipo.

Una obra que constará en los anales de la Asociación Española de Pintores y Escultores y supondrá un cuaderno de bitácora en el que cada página testimonia una vida llena de arte.

Nos gustará que ese inmenso y maravilloso libro, pueda exhibirse también en la exposición del 90 Salón de Otoño de 2023, representando el corazón del arte, la renovación y la vida.

Serán obras originales y pueden incluir la firma de quienes valoran como algo auténtico y especial el certamen más antiguo de España.

Totalmente gratuito, cualquier artista puede formar parte del Libro Conmemorativo del 90 Salón de Otoño.

Sólo tenéis que hacérnoslo llegar a nuestra sede social, hasta el 30 de septiembre de 2023. Porque los artistas son los protagonistas del Salón de Otoño.

Difunde, viraliza, comparte, anima a cuantos artistas conozcas a que se sumen a este homenaje.

¡¡¡¡El 90 Salón de Otoño nos espera!!!!

Códex 90

Libro conmemorativo del 90 Salón de Otoño

Envío de obras hasta el 30 de septiembre de 2023

Obra original

Formato único 29’7 x 42 cms. (DIN A3)

A sangre

Soporte papel 240 g. (tipo Guarro)

Temática y técnica libres

Firmados

Gratuito

 

26 de enero de 2024

 

CÓDEX 90: Exposición y libro conmemorativo

Se celebrará en marzo, en el CC «Julio Cortázar»

 

En abril de 2023 la Asociación Española de Pintores y Escultores abría una convocatoria a todos los artistas que quisieran homenajear al 90 Salón de Otoño, el certamen artístico más antiguo y prestigioso de los que se convocan en España.

Se trataba de realizar una obra original en formato único que se guardaría en una caja conmemorativa bajo el nombre de CÓDEX 90.

La idea fue pronto bien acogida entre socios y amigos que sin dudarlo, han presentado sus trabajos, protagonizando así la hazaña de llegar a cumplir 90 ediciones.

Ampliamos en distintas ocasiones la fecha de entrega de originales, ante las constantes peticiones recibidas por artistas que querían participar pero habían olvidado las fechas.

Al final, la abrumadora llegada de originales nos hizo plantearnos la idea de llevar a cabo una exposición de todos ellos, y además, nos hizo ver que debíamos recoger este excepcional hecho en un libro conmemorativo que en estos momentos está camino de la imprenta.

Tras largas gestiones y con mucha imaginación, la exposición de las obras tendrá lugar en el Centro Cultural “Julio Cortázar”, de Moncloa, entre los días 5 y 26 de marzo de 2024.

Allí mismo el día de la inauguración, que aún está por determinar, presentaremos el CÓDEX 90. LIBRO CONMEMORATIVO DEL 90 SALÓN DE OTOÑO DE LA AEPE, que con tanta ilusión preparamos.

Una felicitación diferente de los creadores a una histórica muestra por la que han pasado desde su creación más de 30.000 artistas de todo tipo.

Una obra que constará en los anales de la Asociación Española de Pintores y Escultores y supondrá un cuaderno de bitácora en el que cada página testimonia una vida llena de arte. Una obra esbozada que, como la vida misma, no se detiene y siempre está viva.

Un inmenso y maravilloso libro que representa el corazón del arte, la renovación y la vida.

Porque los artistas son los protagonistas de la Asociación Española de Pintores y Escultores.

Difunde, viraliza, comparte, anima a cuantos artistas conozcas a acudir a este gran homenaje.

 

Códex 90

Exposición y Libro conmemorativo del 90 Salón de Otoño de la AEPE

C.C. Julio Cortázar

Moncloa-Aravaca

Del 5 al 26 de marzo de 2024

C/ Antonio Machado, 20 – 28035 Madrid

L a V, de 9:30 a 13:30. L a J de 17 a 19 h.

Metro: Valdezarza (línea 7) y Antonio Machado (línea 7)

Bus: 127, 132, 126

6 de marzo de 2024

 

“Códex 90” se presentó en la inauguración de la exposición

El libro se puede adquirir en la sede social de la AEPE

 

AEPE Ediciones acaba de publicar el libro “Códex 90”, un proyecto cuya edición corre a cargo de Mª Dolores Barreda Pérez, Secretaria General de la Asociación Española de Pintores y Escultores

Autores consagrados junto a artistas noveles, participan en este libro en el que aparecen 150 obras de los mejores artistas del momento, que abordan su propio homenaje al 90 Salón de Otoño, con una creación propia, reflejo de su mejor arte.

La presentación tuvo lugar en el acto de inauguración de la exposición que se inauguró el día 5 de marzo de 2024, donde se pudieron contemplar todas las obras que forman parte del Códex 90, que se celebró en el C.C. Julio Cortázar del distrito de Moncloa, y que pudo visitarse hasta el día 26 de marzo de 2024..

Como si fuera una felicitación de los artistas a una histórica muestra por la que han pasado desde su creación más de 30.000 artistas de todo tipo, así nacía la idea de un libro especial, diferente y único que de proyecto, pasó a ser realidad con el libro presentado, y amplió sus horizontes con la magnífica exposición en la que fueron mostrados.

Con esta idea la Asociación Española de Pintores y Escultores propuso a todos los artistas que felicitaran a la que ha sido una ocasión única, la celebración del 90 aniversario del Salón de Otoño, el certamen artístico más antiguo y prestigioso de los que se convocan en España.

En total son 150 los autores contemplados en la presente edición que conforman un catálogo de motivos únicos y excepcionales en los que cada artista ha desbordado pasión, creatividad y vida.

El resultado no ha podido ser del todo más asombroso y creativo, puesto que los artistas han mostrado creaciones simpáticas, lógicas, sorprendentes y prodigiosas que no van a dejar a nadie indiferente.

Mª Dolores Barreda Pérez, Secretaria General de la AEPE, ha sido la encargada de formalizar el proyecto, que finalmente se ha traducido en la edición de un magnífico libro que rebosa creatividad y sorprendentes propuestas visuales de artistas provenientes de distintas disciplinas plásticas.

Un año ha llevado toda la realización del proyecto, desde su convocatoria en abril de 2023 y hasta su presentación actual, después del éxito y buenos resultados que se obtuvieran en la realización de un libro de Autorretratos, otro de las Greguerías de Ramón Gómez de la Serna, además de la Baraja artística ilustrada.

Ante todo Mª Dolores Barreda Pérez destaca que el “Códex 90” supone un gran ejercicio de generosidad de los artistas y de todos los que, de alguna manera, hemos participado en la propuesta, si bien los artistas son los verdaderos protagonistas de esta iniciativa, que contó desde el principio, con la ilusión y participación de todos los socios, desde grandes autores, reconocidos y consagrados, a nuevos y jóvenes, unidos en el proyecto común de mostrar lo mejor de su arte, en lucha por definir su propio estilo y entidad.

El Códex 90 tiene una edición limitada de 200 ejemplares, se pondrá a la venta a partir del 6 de marzo de 2024, al precio simbólico de 15 euros ejemplar, y cuentan con 176 páginas y su correspondiente número ISBN internacional y Depósito Legal:

ISBN: 978-84-09-58709-4
Depósito legal: M-4315-2024

Los artistas participante en Códex 90 son:

Héctor Acevedo (Héctor Adolfo Acevedo Rojas) – Herminia Aguiar (Herminia Aguiar Muñiz) – Joaquín Alarcón González – Aracely Alarcón Morales – Amparo Alegría (Amparo Alegría Pellicer) – Alonso de Sousa (Susana Alonso de Sousa) – Isabel Alosete (Isabel Moreno González) – Leila Alonso (Leila Alonso García) – Ancaiz. Andrés Carcelén (Andrés Carcelén) – Carlos Andino (Carlos Andino Cerrato) – Julio Antao – Alberto Artigas Azcoaga –  Fernando Asián (Fernando Asián del Barco) – C. Baco (Carmen Baco Covarrubias) – Mercedes Ballesteros (Mercedes Ballesteros Rodríguez) – Asunción Bau Forn – Paco Bertrán (Francisco Bertrán Hernández) – Joaquín Besoy (Joaquín Besoy Posada) – Margarita Blanco Gómez – Sebastián Calderón Honrubia – Mª. Carmen de la Calle Llurba – Rafael Carmona Heredia – Paloma Casado (Paloma Casado López) – María Castro del Río – David Cearns – José Manuel Chamorro Chamorro – Eva Contreras Francisco – Concha Corral (Concha Corral López) – Valeriano Cortázar (Valeriano Cortázar Pérez) – Pilar Cortés (Pilar Cortés López) – Concepción Cortés – Menorquina (Concepción Cortés Aedo) – Leovigildo Cristóbal Valverde (Leovigildo Jorge Cristóbal Valverde) – Maryla Dabrowska (Maryla Dabrowski Pernas) – E. Delgado (Enrique Delgado Contreras) – Sopetrán Domènech (Sopetrán Domènech Llorente) – José Domínguez Hernández – Miguel Ángel Duarte «Enzo» (Miguel Ángel Duarte) – Carmen Durán (Carmen Durán Sanz) – Federico Echevarría (Federico Echevarría Sainz) – Carmelo Esteban (José Carmelo Esteban Gracia) – Pilar Ezquerra Samaniego – Mª FELIX mfelixarte (Mª. Carmen Félix Rodríguez García) – Soledad Fernández (Soledad Fernández Ramos) – Joaquín Fernández Igual – Raimundo Folch – Manuel Fournier (Manuel Fournier Martínez) – María de Francisco Salces – Herminda Gago (Mª. Herminda Gago Blanco) – Mariano Galán (Mariano Galán Ortega) – Inmaculada Galán (Mª. Inmaculada Galán Rodríguez) – Galiana (Juan Pérez Galiana) – Juan Gallardo Jiménez – Fernando García de Juan – M. García García (María García García) – Fernando García Monzón – Ana García Pulido – Javier García Roco – Federico García Zamarbide – Gasconde (Fernando Gascó Alberich) – Luis Javier Gayá Soler – Argentina González Tamames – Luis Ignacio González Torres – Lydia Gordillo (Lydia Gordillo Pereira) – Dolores Guerrero (Mª. Dolores Guerrero Lombardia) – Alejandro Gutiérrez Chamorro – Marien de Haro (Marien de Haro Moreno) – María Antonia Hernández García – Fernando Herranz Alonso (Alon) – Aarón Izquierdo (Aarón Izquierdo Parrilla) – Juan Jiménez – Jon Bay (Cristóbal Marín Fernández) – Juan Luis (Juan Luis Barud) – Karfer Eguia (Karlos Fernández Eguia) – Deiviz Kostoya (David Costoya López) – Svetlana Kovalenco (Svetlana Kovalenko Schelchkova) – Agustín Lanza Garrido – Patricia Larrea (Patricia Larrea Almeida) – Carmen de la Lastra (Carmen de la Lastra Martínez de Tejada) – Pablo Linares Amor – Pilar López Duque – Lola López (Mª Dolores López Fernández) – Esther López Valls – Juan Manuel López-Reina (Juan Manuel López-Reina Coso) – Juan Ramón Luque Ávalos –  Ana Llestín (Ana María Miralles) – Nacho Mallagray (Ignacio Mallagray Martínez) – Juan Alfonso Marbán Muñoz – Alfonso Marín Marigil – Victoria Márquez (Mª. Victoria Márquez Casero) – Fernando de Marta (Fernando de Marta Sebastián) – Pía Martínez Cabrera Palustrán     – Jesús S. Martínez (Jesús Santiago Martínez Díaz) – Raquel Mayor (Raquel Mayor Lázaro) – Juan Merelo (Juan Merelo Villafan) – Geanina Miler (Geanina Elisabeta Miler) – Mónica Mittendorfer (Mónica Mittendorfer Valero) – Concetta Montenegro (Conchita Paz Montenegro) – Laura Moret (Laura Moret Escrig) – Javier de Mota (Javier García Consuegra López de Mota) – Antonio Municio (Antonio Municio Gutiérrez) – Juan Manuel Muñoz Bianchi – Pedro Muñoz (Pedro Muñoz Mendoza) – Pilar Navamuel (Pilar Navamuel Rojo) – Concha Navarro (Concha Navarro Conde) – Jorge Nuno (Jorge Manuel Cordeiro Alves Nuno) – Marina Olalla Marqués – Manuel Olivas (Manuel Olivas Gálvez) – Francisco Ortega Guzmán-FOG-  (Francisco Ortega Guzmán) – I. Ortuño (Isabel Ortuño Gómez) – Manuel Pacheco (Manuel Méndez Pacheco) – Ángela Palomeque (Mª Ángela Palomeque Messia) – Luisa Paz (Luisa Paz Montenegro) – Julián Peinador (Julián Peinador de Juana) – José A. de la Peña (José Antonio de la Peña García y Gadea) – Pilar Pérez Hidalgo – Ana I. Plaza (Ana Isabel Plaza Carcelén) – Carmen Prado – Carmen Prieto (María Carmen Marta Prieto Carrasco) – Daniel Prieto (Daniel Ramón Prieto Fernández) – Carlos Puente Jiménez – Julio A. Queipo Ferragut – Soraya Quintana (Soraya Quintana Quiñones) – Ángel Raposo (Ángel Raposo González) – Pablo Reviriego (Pablo Reviriego Moreno) – Alfonso Rivero de Aguilar – Conceicao María Rocha de Oliveira – Carmen Rodríguez Prados – Manuel Rodríguez Tabernero – July Romero – Trinidad Romero (Trinidad Romero Blanco) – Manolo Romero (Manolo Romero Solano) – Cleusa Rosseto – Riccardo Rossi – Laura Ru (Laura Gómez Rubio) – Ángel Rueda (Ángel Rueda Rodríguez) – Conceicao Ruivo – Mariana Russo (Mariana Russo Sivira) – Alicia Sánchez Carmona – Chus San (Mª. Jesús Sánchez Gómez) – Carolina Sauca (Carolina Sauca Hernández) – Linda de Sousa – Milena Stefanova Iordanova – Graciela Turdo – Mª Luisa Valero – Lola Vallejo (Dolores Vallejo Ruiz) – Ángeles Vaquero (Ángeles Vaquero Pascual) – Miguel Vedia (Miguel Vedia Ortega) – Ana Vivas (Ana Gómez Vivas) – Begoña Zamora Maroto – Zárate (Mª Luisa Martínez de la Pascua) – José Zorita-Zeta- (José Zorita García).

Atendemos los pedidos en secretaría de la AEPE

C/Infantas, 30. 2º – Dcha. 28004 – Madrid

Lunes a viernes: 10:00-14:00 y de 17:00-20:00

administracion@apintoresyescultores.es

915 22 49 61 / 630 508 189

 

 

 

Recordando… Picasso en el IV Salón de Otoño

Obras, artistas, socios, pequeñas historias…

Por Mª Dolores Barreda Pérez

 

Picasso en el IV Salón de Otoño

 

El IV Salón de Otoño de 1923

La cuarta edición del Salón de Otoño de la Asociación de Pintores y Escultores se celebró en el Salón de Exposiciones del Parque del Retiro de Madrid, entre los días 5 y 31 de julio de 1923.

El Jurado de Calificación del Salón estaba formado por Julio Vicent, como Presidente, y contaba con los Vocales José Gutiérrez Solana, Juan Francés y Julio Moisés.

En aquel Salón había cuatro secciones: pintura, escultura, grabado y arte decorativo, y se exhibieron 487 obras entre las que figuraban algunas de grandes maestros hoy olvidados como Joaquín Biosca, Chicharro Gamo, Bernardino de Pantorba, Castro Gil, Lorenzo Aguirre, Alfonso Grosso, Gutiérrez Solana, Juan Esplandíu, Fernández Balbuena, Gustavo de Maeztu…

Abierto al público el día 5 de octubre, cuatro días más tarde era visitado por los Reyes, Alfonso XIII y Victoria Eugenia, recorriendo todas las salas acompañados de la Junta Directiva de la Asociación de Pintores y Escultores y de la Comisión organizadora. Lejos de protocolos y autoridades políticas, los Reyes visitaron el Salón del Retiro, al que llegaron conduciendo su propio vehículo.

 

En general, la prensa acogió el IV Salón con malas críticas, olvidando el espíritu con el que había nacido, que se resumía en las premisas de que “cualquier artista podría participar, que se trataba de una exposición de artistas independientes que ensanchaba la reducidísima esfera expositiva y que sus participantes lo hacían ajenos a la obtención de medallas y recompensas económicas”.

Luis Pérez Bueno explicaba que “Es una exposición sin jurados, premios, medallas ni bolsas de viaje, ni esperanzas de adquisiciones por el próvido Estado, ni nada que induzca o sirva de acicate en la aplicación de las perversas artes de las influencias, zancadillas, malevolencias y maltratos en provecho de unos para daño de los más. La Asociación abre las puertas noble y generosamente a cuantos pintan, esculpen o se dedican a las Artes decorativas; todos pueden exponer sus obras sin impedimento alguno, con amplia y hermosa libertad. Así, en la admisión de los trabajos no tiene para qué existir la benevolencia que en otras exposiciones da por resultado esa vergüenza artística que la gente, con agudo sentido, denomina sala o salas del crimen… Si el Salón en su conjunto, resulta artísticamente bueno, malo o pésimo, fruto será de los artistas… fundamentalmente sirven estas exposiciones para que vayan dándose a conocer cuantos emprenden el camino del arte”… (El Liberal).

Y A.VG., sentenciaba …”Mas la culpa del fracaso no es imputable por entero a los organizadores. Alcanza hasta a los artistas mismos, que evitan su comunicación con el público siempre que no medien intereses económicos” (El Imparcial).

Pedreau firmaba un artículo en el que destacaba que “Unos cuantos artistas llenos de entusiasmo, sin protección alguna oficial, con escasos medios económicos, organizan anualmente un Salón de pintura y escultura donde expone todo el que quiere, sin más requisito que aportar una pequeño cuota para contribuir al coste de las instalaciones. Un acto de esta naturaleza debiera arrancar elogios y alientos de la crítica, de esa crítica que nos está diciendo que es menester acabar con el sistema de admisión practicado en los certámenes nacionales… El Salón de Otoño ha desencadenado sobre sí el mal humor y la pedantería de los pseudo críticos, que tanto abundan en este bendito país, y despectivamente, faltando el respeto que toda producción artística merece, dicen en cuatro líneas que todo lo expuesto es malo… Aquí basta con que un señor haya hecho… cuatro monografías… para que ya se crea con el derecho de maltratar a los artistas que no le son simpáticos y hablar mal del arte español contemporáneo… No es la misión de la crítica desalentar, sino orientar razonando. Los que hablan del actual Salón, repiten la eterna vulgaridad de que si los Salones de París son así o de la otra manera y dan la lista de los grandes genios, cuyas obras han pasado de moda tan pronto como el acaparador dio salida al último apunte para un museo de nueva creación. En el Salón de Otoño hay bueno, malo y mediano, como en todas las Exposiciones de todos los países del mundo; y no se revela ningún genio, porque tampoco éstos se ven tan fácilmente, al igual que ocurre en todas partes, digan lo que quieran los pseudocríticos que padecemos” (La Acción).

Se comenzó entonces a repetir la idea de que había que seleccionar de alguna manera la obra presentada, lo que contradecía el ánimo con el que había nacido el Salón de Otoño, siendo del todo necesario “criterio amplio y sobre todo flexible. Es decir, fácilmente adaptable a cada situación y a cada otoño”.

Picasso y su “Apache”

Según se especifica en el catálogo del IV Salón de Otoño de 1923, la inscripción en la sección de pintura se realizó a nombre de “Ruiz Picasso, D. Pablo; natural de Málaga; reside en París, (Propiedad de D.N.N.)”.

Con el número 277 figuraba la obra que llevaba por título “Un apache”, óleo de 0,70 x 0,80.

Además, una fotografía reproducía la obra en la página 70.

 

En diferentes medios se destacaban las obras presentadas en esta edición, sobre todo de artistas como Gutiérrez Solana, Llorens, Maeztu, Grosso, Chicharro Gamo…

Tal y como recogía la prensa del momento, “en las diversas salas de que se compone el IV Salón aparecen numerosas firmas nuevas o poco conocidas y se insinúa alguna que otra tendencia renovadora” (La Época 6/10/1923).

Para Ricardo Gutiérrez Abascal, que firmaba sus críticas como Juan de la Encina, “Retrato de un apache”, por Pablo Picasso, sin duda se trata de una obra primeriza de este singular autor, antología viva de todos los modos del arte. Es fino y expresivo y está pintado con prodigiosa habilidad”… (La voz 9/10/1923).

Antonio Méndez Casal escribía “Obra de orientación y técnica avanzadas, aun cuando de la primera época, un poco vacilante, del artista, es la titulada “Un apache”, del discutido pintor malagueño, residente en París, Ruiz Picasso. Mas, ¡oh contraste!, contemplada en medio de obras absurdas, produce la sensación de una obra clásica. Este apache, verdadera piltrafa física y moral de los bajos fondos parisienses, emerge de una penumbra azulina transparente con un valor lumínico espectral. Ante esa obra el espectador de sensibilidad sufre una leve sacudida de emoción, de una emoción compleja, mezcla de piedad, repugnancia y terror. Figura ingrávida, la ingravidez quizá sea su mayor atractivo”… (Blanco y Negro 18/11/1923).

Antonio Espina destacaba brevemente que un “Apache”, de Picasso, que si es de veras de Picasso pertenece a su prístina vacilación carrieresca” (España 27/10/1923).

En la Gaceta de Bellas Artes del 1 de noviembre de 1923, con motivo de la celebración del IV Salón de Otoño, se da cuenta de las calificaciones del Salón y las propuestas para ser Socios de Honor, Socios de Mérito y Propuestas Para Socios de la Asociación de Pintores y Escultores, ya que por aquella época estos títulos eran en sí un premio y un orgullo, el de la pertenencia a la entidad.

Figura así como “Propuesto Para Socio”, en la modalidad de pintura, apareciendo de esta forma en la extensa relación de artistas.

Sin embargo, al final del listado, aparece una nota que transcribimos literalmente: “El Jurado hace constar que su deseo era hacer Socios de Honor a Pablo Ruiz Picasso y Gustavo de Maeztu; pero se han visto imposibilitados de hacerlo porque el Reglamento del Salón de Otoño solo permite tal cosa respecto a aquellos artistas que ya sean socios”. Pablo Ruiz Picasso no lo era, por lo tanto, no le correspondía tal mérito.

Los apaches de París

Tras el revolucionario invento de los hermanos Lumiere, en el que las imágenes de la vida cotidiana causaban un gran impacto, el público perdía rápidamente el interés si el material se volvía repetitivo.

Las primeras imágenes de un espectáculo del oeste, protagonizadas por el norteamericano Buffalo Bill, causaron sensación en la comunidad internacional, presentando auténticos personajes de la época del western, no a actores. De esta forma, los indios se convirtieron en una visión común.

Interesaba todo de ellos, de los cowboy y de los indios, como la doma de un caballo, el rodeo, el transporte y vigilancia del ganado y este tipo de escenas del Oeste, que ayudó a glorificarlos. El gran público estaba fascinado con su modo de vida trashumante y aventurero: cabalgando, durmiendo al raso, sentándose en torno a la hoguera para comer, los carromatos, pegando tiros a los cuatreros y comanches, a los apaches…

Los apaches y vaqueros que participaban en el espectáculo de Buffalo Bill se hicieron tan populares que hicieron visitas triunfales en capitales europeas, incluyendo espectaculares apariciones en los Campos Elíseos de París.

Gerónimo, el jefe de los apaches americanos

 

A partir de 1910 los indios y las filmaciones del oeste eran ya muy populares, de modo que en los primeros años del siglo veinte, cuando las bandas callejeras prendieron la llama de la delincuencia y la violencia en las calles de París, la prensa francesa hizo de ellas un fenómeno social con el que denominar a los delincuentes en la Belle Epoque.

Temidos y admirados, aquellos hombres fueron llamados “apaches”, creando sus propios códigos, conductas, estética y su propia cultura.

Desde los barrios de Belleville, La Bastilla o Montmatre, del noroeste de París, y avivado por periódicos y revistas, poco a poco se creó una leyenda que el público terminó por romantizar.

Los apaches de París vestían con gorras con viseras encasquetadas, chaquetas de satén, camisetas de rayas, chalecos, cinturones de franela roja que ajustaban en la cintura pantalones con bolsillos anchos y, colgando del cuello, fulares con los colores que identificaran la banda a la que pertenecían. Tatuajes y unas siempre impolutas botas con botones dorados. Además, hablaban, literalmente, su propio idioma, el “jare”, un argot cuchicheado entre los callejones de los barrios pobres.

Portada de un periódico francés en la que se puede ver la vestimenta típica de un apache

 

Usaban como arma el zarin, un pequeño cuchillo fino y afilado fácil de ocultar. Palos, piedras, porras y puños americanos se unían al arsenal donde el recurso más mortal era el revólver apache.

Utilizaban la técnica del ”le coup de pére François”: un apache utilizaba su fular para atrapar por el cuello a su víctima. Se giraba y, espalda con espalda, tiraba del fular mientras se inclinaba hacia delante para dejar colgando a la víctima, a quien otro apache robaba sus pertenencias, sin más opciones que ver cómo se marchaban los ladrones mientras permanecía aturdido recuperando la respiración.

Las distintas versiones del origen del apodo de “apaches” confluyen en la única verdad, que su comportamiento se asemejaba al estereotipo que por entonces se tenía sobre los indígenas americanos, imagen avivada por espectáculos como el del lejano oeste de Buffalo Bill.

Lo cierto es que el apodo gustó a los propios bandidos, que acogieron el término y lo expusieron con orgullo.

El estallido de la Primera Guerra Mundial diluyó la presencia de apaches en las calles de París, que pasaron a engrosar las filas militares.

El modus operandi de las fechorías de los apaches

 

Los apaches en España

El apodo se extendió también a otros lugares de Europa y en ciudades como Madrid o Barcelona, era utilizado como sinónimo de bandido urbano.

Justo en esa época, y a la vez, llegó a Europa el baile “one step”, nacido en EEUU, derivado del foxtrot y del charlestón, y que fue muy popular en los años veinte.

Los músicos españoles adaptaban sus creaciones a las nuevas tendencias, y así, en 1929, el popular compositor Rafael Oropesa, autor de pasodobles inolvidables como “Domingo Ortega”, “Belmonte” o “Chiclanera”, creó el one step llamado “Si vas a París, papá”, con letra de M. Álvarez Díaz y Florencio Estrada Ledesma, que pronto se hizo muy popular.

Coreado y bailado, principalmente en la voz de Celia Gámez, entre sonrisas pícaras y dobles sentidos, poco a poco fue olvidándose.

Pero el cuplé volvió a ponerse de moda gracias a la interpretación de Marujita Díaz en la película “Y después del cuplé”, dirigida por Ernesto Arancibia.

Laura Valenzuela interpretó también este tema en la comedia musical “Pierna Creciente, falda menguante”, que en 1970 dirigió Javier Aguirre y en la que compartía protagonismo con Fernando Fernán Gómez y Emma Cohen.

El cuplé relata cómo una niña, que sabe más de la cuenta, advierte a su padre del peligro parisino de los apaches, los cabarets y hasta del foiegras de pato, y a pesar de que la letra pueda parecer anodina, no es tan absurda como parece una vez que sabemos quiénes eran los apaches.

Reproducimos íntegramente la letra del cuplé por pura curiosidad:

A París va papá y no dice para qué, / si va a ver el Moulin Rouge o a buscar algún bebe. / A París va papá en el rápido de Irún, / no se sabe si a negocios o se marcha al buen tuntún. / Y ya la estación todo es preguntar, / todo es suponer y rumorear, / y su hijita al ver que se va papa se puso a gritar desde el anden: / Si vas a París papá cuidado con los apaches, / si en juerga de taxis vas procura salvar los baches. / Si vas a París papá no comas foiegras de pato, / ni vayas al cabaret si quieres pasar el rato. / Te iras al bazar y allí un muñeco a mí tú me comprarás, / lo mismo que mi hermanito / si vas a París papá. / Al volver de París en su casa se encontró / dos bebes que aquí en Madrid su señora le encargó, / y al sacar del baúl otro nene que el compró ante aquella carambola la chiquilla se escamó. / Y se echó a reír y miró a papá, / como diciendo a mi nadie me la da, / y cogió al petít que era el chicarrón, / se puso a cantar y empezó a buscar un biberón. / Si vas a París papá cuidado con los apaches, / si en juerga de taxis vas procura salvar los baches. / Si vas a París papá no comas foiegras de pato, / ni vayas al cabaret si quieres pasar el rato. / Te iras al bazar y allí un muñeco a mí tú me comprarás, / lo mismo que los gemelos / si vas a París papá.

 

Una obra de principios de siglo

Desconocemos si el propio Picasso se inscribió en el IV Salón de Otoño de 1923. El hecho de que en la inscripción figure que la obra es propiedad de D.N.N. no resuelve las dudas, ya que en cualquier caso, y para presentar la obra al certamen, el propietario necesitaría la conformidad del autor.

“Un apache” es una obra que Picasso debió pintar alrededor de 1902, cuando a su regreso de Barcelona, pasó el invierno en París, viviendo con Max Jacob en una pequeña habitación en la rue Popincourt, una calle entonces poblada de apaches que daba al bulevar Voltaire.

Allí compartió habitación, y hasta cama con él, antes de mudarse al Bateau-lavoir, en unos años en los que florecían las lecturas de poesía, exposiciones de pintura, el teatro de sombras chinescas o las audiciones musicales en el cabaré Le Chat Noir, cuyo nombre evocaba el cuento de terror de Edar Allan Poe.

Bulliciosos bulevares entre la place Pigalle y la place Blanche donde estudiantes, músicos, escritores y artistas dedoraban el café y retrataban a jóvenes escandalosos, creativos y dados a la diversión sin ningún tipo de prejuicio, envueltos en las aventuras y desventuras más canallas del barrio, entre ellas las de los conocidos apaches.

Una etapa de la vida de Picasso poco explorada, que gracias a esta obra traemos al recuerdo en este año en que se conmemora el 50 aniversario de su fallecimiento y el 100 aniversario de su participación en el IV Salón de Otoño de la Asociación Española de Pintores y Escultores.

Picasso periodo Cabaret, Autorretrato (“Yo, Picasso), 1901

Pablo Ruiz Picasso en una fotografía de 1904

Picasso en 1920

 

Los Directores de la Gaceta de Bellas Artes de la AEPE: Ricardo Baroja y Nessi

Por Mª Dolores Barreda Pérez

 

Los Directores de la Gaceta de Bellas Artes

de la Asociación Española de Pintores y Escultores

 

cabecera 1

 

La Gaceta de Bellas Artes: 1930

Como veíamos en el anterior número, la Gaceta de Bellas Artes estaba regida por un comité de redacción en el que figuraba el secretario, y en el que Roberto Fernández Balbuena ejercía de director, figurando también en dicho comité José Subirá, redactor de temas musicales, y Enrique Estévez Ortega.

En el número de julio del año 2021 ya abordamos la biografía de Roberto Fernández Balbuena, y en los pasados meses de mayo y junio, las de José Subirá y Enrique Estévez Ortega.

La Gaceta de Bellas Artes dio un profundo cambio adaptándose al estilo de otras revistas ilustradas de la época, teniendo a partir del mes de mayo de 1931, periodicidad mensual. Hubo un intento de crear una nueva revista cuya dirección y comité de redacción suscribía la directiva, a las órdenes de su presidente, Julio Moisés y Enrique Estévez Ortega como redactor jefe.

En 1930 el comité de redacción estaba integrado por:

Antonio Ortiz Echagüe, en aquellos momentos el Presidente de la AEPE,

Jesús María Perdigón, de quien dimos cuenta ya en esta misma Gaceta de Bellas Artes en el mes de marzo pasado,

Ángel Vegué Goldoni, a quien conocimos en la Gaceta de abril,

Ramón Pulido, cuya biografía publicamos el mes de junio de 2022,

Ricardo Baroja, que nos disponemos a presentar ahora,

Francisco Esteve Botey, aún por descubrir

Roberto Fernández Balbuena, cuya biografía abordamos en la sección de las Medallas de la AEPE,

José Subirá, que descubrimos el pasado mes de mayo y

Pedro García Camio, Secretario de la AEPE, a quien tratamos en la Gaceta de diciembre de 2022.

 

Ricardo Baroja y Nessi

BAROJA Y NESSI, Ricardo             P.G  1910 (F)                      12.ene.1871     M.RIO TINTO                    MADRID/VERA BIDASOA  19.nov.1953

Socio Fundador

Socio de Honor

Vocal de la Junta Directiva

 

 

Ricardo Juan Gualberto de la Santísima Trinidad Baroja y Nessi nació en Minas de Ríotinto, Huelva, el 12 de enero de 1871.

Hijo del ingeniero de minas, escritor, editor y periodista vasco José Mauricio Serafín Baroja Zornoza, y de la madrileña Andrea Carmen Francisca Nessi Goñi, de ascendencia italiana. El matrimonio tuvo cuatro hijos: Darío, que nació en Riotinto y murió joven en 1894 de tisis; el pintor, escritor, archivero, ilustrador de libros y grabador Ricardo; Pío, que dejaría la profesión de médico por la de novelista hacia 1896; y la última hermana, Carmen, socia también de la AEPE y cuya biografía abordamos en febrero de 2017, inseparable compañera del novelista, ocasional escritora también. Es posible que naciera un quinto hermano, César, y que falleciera a muy temprana edad. La relación estrecha entre los hermanos se mantuvo hasta el final de sus días.

Por los distintos trabajos del cabeza de familia, los traslados por la geografía nacional fueron constantes, hasta que la madre, cansada de tanta itinerancia, decidió asentarse en Madrid, en 1886, en un caserón de la calle de la Misericordia, junto al Monasterio de las Descalzas Reales. La familia se trasladó después a la Calle Atocha, cerca del Colegio de Cirugía de San Carlos.

Cursó estudios colegiales en Valencia, San Sebastián, Pamplona y Bilbao.

Durante los veranos, para escapar del calor de Madrid, la familia solía reunirse en San Sebastián y más tarde en Vera de Bidasoa.

Autorretrato

 

En 1902 la familia se establece en una casa de la calle Juan Álvarez Mendizábal del barrio de Argüelles, en un antiguo hotel que necesitaba numerosas reformas y allí estuvieron viviendo hasta que falleció el padre en 1912.

Ingresó en la Escuela Politécnica de Ingeniería de Madrid, pero un amago de tuberculosis, enfermedad que ya había matado a su hermano Darío, alarmó a sus padres y les hizo desistir de que siguiera cursando una carrera tan dura.

Restablecido de la enfermedad, estudió entre 1888 y 1891 en la Escuela de Diplomática para pertenecer al Cuerpo de Archivos y Bibliotecas, asistiendo a la vez a una academia de pintura, donde recibe clases del pintor valenciano y socio de la AEPE, Eugenio Vivó Tarín.

Frecuenta los círculos artísticos de Málaga y Valencia, donde conoce al pintor valenciano y también socio de la AEPE, Julio Peris Brell, con quien entabla una gran amistad.

Comienza ilustrando los primeros libros de su hermano y una vez aprobadas las oposiciones, en 1897 es destinado al Archivo de Cáceres, donde trabajará de forma intermitente mientras lo hace ocasionalmente en la Biblioteca de Bilbao, en 1900 en los archivos de la Delegación de Haciendo de Teruel y en 1901 en la Biblioteca Provincial de Segovia.

En 1902 abandonará definitivamente la carrera, centrándose en su vertiente artística.

 

 

Colabora como ilustrador en diversas revistas como Alma Española, Arte Joven y Electra, a veces con el pseudónimo de «Juan Gualberto Nessi», y frecuenta las tertulias del Café Levante, con Valle Inclán, y las de El Lion d’Or, Pombo y El Gato Negro.

Hizo además viajes por España con su hermano Pío, siendo redactores de El Globo, que les enviará a Marruecos una temporada. Ricardo no descuida su vocación artística y lleva trabajos suyos a la Exposición de Arte Moderno de Bilbao, y expone también en San Sebastián y Madrid.

Entre 1900 y 1906 se da con preferencia a la técnica del aguafuerte y desde entonces concurre a las Exposiciones Nacionales de Bellas Artes de 1901, 1906, 1910, 1912, 1920, 1924, 1926, 1930 y 1936, obteniendo una Segunda Medalla en la de 1906 y la Primera Medalla en la de 1908.

En 1903 funda junto a Pablo Ruiz Picasso y Francisco de Asís y Soler, el grupo de «Arte Joven», una revista modernista editada en Madrid que publicó sólo cinco número en 1901 y en donde escribían Unamuno, Pío Baroja, Bernardo G. de Cándamo, Ramón de Godoy y Solá, Jacinto Verdaguer, Salvador Rueda, Azorín…

Paisaje

La venta

 

En 1910 cofundó la Sociedad de Grabadores Españoles, después reagrupada como la denominación de Los 24, grupo que editó tres números de la revista de esta técnica La Estampa, antes de que pasara a publicarla el Círculo de Bellas Artes.

En 1915 la compañía de teatro de María Guerrero estrenará su obra El Cometa, y dos años más tarde publicará su primera novela, Aventuras del submarino alemán U…A partir de entonces, se suceden las obras como Fernanda y El pedigrée.

En 1919, al borde de la cincuentena, contrae matrimonio con Carmen Monné, una pintora norteamericana de origen francés a la que había conocido en casa del pintor y socio de la AEPE, Ramón de Zubiaurre. Con ella había participado en grupos de teatro de aficionados como El mirlo blanco y El cántaro roto, convirtiéndose poco a poco en fiel colaboradora.

En 1925 ofrece una conferencia en el Círculo de Bellas Artes de Madrid que tuvo mucha repercusión, ya que a pesar de no citar nombre alguno, hacía referencia a Juan de la Encina y a José Francés, atacando despiadadamente la crítica de arte del momento, lo que motivó que desde entonces, los críticos no tuvieran hacia él una buena actitud.

En 1928 es nombrado profesor de la Escuela Nacional de Artes Gráficas y en esa etapa volverá a dedicarse intensamente al grabado, que tenía abandonado desde 1912.

Isla de los Faisanes del río Bidasoa

Costa vasco francesa

 

Aficionado al teatro, podemos verle en un pequeño papel en la película muda vanguardista de Nemesio Sobrevila, titulada El sexto sentido, de 1929.

Frecuenta también las tertulias de la Cacharrería, la del  café Granja El Henar, con Valle Inclán, y la del Café Varela, con Antonio y Manuel Machado.

En 1931, se enemista con su antes amigo Manuel Azaña, director del Ateneo, y sufre un accidente de automóvil en Navalcarnero, viniendo de un mitin político a favor de la República, en Arenas de San Pedro y a consecuencia del cual pierde el ojo derecho, lo que le obliga a dejar la pintura y el grabado y a consagrarse de lleno a la literatura, si bien volvería a coger los pinceles de forma ocasional.

Ganó el Premio Nacional de Literatura en 1935 por su obra La Nao Capitana, y ese mismo año empieza a escribir en Diario de Madrid los artículos sobre tertulias madrileñas que constituirán su libro Gente del 98.

Con su mujer y otros escritores cofundó, en 1933, la Asociación de Amigos de la Unión Soviética.

Puerto

El puerto

Castigo de incendiarios

 

Al estallar la Guerra Civil, un bombardeo destruye la casa madrileña del matrimonio, perdiéndose en esa destrucción bastante de la obra literaria de Ricardo escrita hasta entonces.

Se trasladan entonces al caserío Itzea, en Vera de Bidasoa, donde vivirán toda la contienda afrontando grandes estrecheces económicas. Allí pintará setenta tablas con temas bélicos, tal vez la más extensa aportación de ningún artista a los desastres bélicos del 36 y escribirá obras como La tribu del halcón y El coleccionista de relámpagos, Bienandanzas y fortunas, Pasan y se van y El Dorado, ilustrado por él con setenta xilografías.

A partir de 1940 expone de nuevo en San Sebastián, Bilbao y Madrid.

Hombre inquieto y polifacético, se atreve incluso a componer algunas piezas musicales.

En 1949 expondrá dos veces en San Sebastián, en enero los aguafuertes y en agosto los óleos, fundando también en esta ciudad y junto con el Socio Fundador de la AEPE Ascensio Martiarena Lascurain, y quizás al modo de la AEPE, la Asociación Artística de Guipúzcoa.

En 1952, siendo ya octogenario y estando casi ciego, vuelve a exponer en San Sebastián, vendiendo todos sus cuadros.

Dos años después y a consecuencia del cáncer que padecía en la lengua, provocado por su desmedida afición al tabaco que fumaba en pipa, fallece el 19 de diciembre, en el caserío de Vera de Bidasoa.

Escena callejera

En el campo

 

En 1957 su viuda Carmen Monné organizó una exposición-homenaje de todas sus obras disponibles, pero murió antes de poder verla, aunque se logró realizar en junio-julio de dicho año en el Museo de Arte Moderno de Madrid.

Dejó más de ciento treinta grabados, unos mil óleos y dos docenas de libros entre ensayos y novelas, así como otra gran obra literaria dispersa como articulista en distintas revistas y periódicos.

En su ciudad natal, Minas de Riotinto, cuenta con una avenida que lleva su nombre.

Hombre de carácter alegre, polifacético y de extraordinaria creatividad, su obra como grabador es muy importante, considerándose como el sucesor de Goya.

Su obra pictórica iniciada hacia 1885, se puede dividir en dos etapas atendiendo a que en una pintó por afición (1885-1936), y en la otra tuvo que pintar para poder comer (1937-1952). De su época de aficionado, de lo que siempre le gustó presumir, hay memoria de unos cien óleos, variados y bellísimos, serie de Croquis madrileños, Paisajes andaluces, Quais parisinos; retratos familiares, Carmen Baroja (1905, perdido), Serafín Baroja (1910), Carmen Nessi (1913), y de amigos como Azorín (1901), Valle-Inclán (1902), Corpus Barga (1912), María Guerrero (1916), de los que por desgracia se han perdido aproximadamente la mitad durante la Guerra Civil, y de esa segunda etapa de pintor profesional, varios cientos más que, año tras año, llevaba para vender a exposiciones de San Sebastián, Bilbao o Madrid.

Sus aguafuertes tienen dos momentos creativos: uno que se extiende desde finales del siglo XIX hasta 1912, serie de Estampas populares (medallas en las exposiciones nacionales de 1906 y 1908) y otro más reducido en cantidad y tiempo que ocupa desde 1927 a 1931, series Revolucionaria y Marinera, año en el que queda tuerto y ya no pudo grabar más.

 

Retrato de María Guerrero

 

De este quehacer se conservan unas cuarenta planchas, veinte en la Calcografía Nacional pertenecientes a las medallas que le concedieron y otras veinte en “Itzea”, la casa de los Baroja, que se rescataron después de la guerra del taller del estampador Adolfo Rupérez, de un total de ciento treinta y siete grabados hasta hoy catalogados. El resto de sus planchas se perdieron con el bombardeo y la destrucción de su casa y taller de la casa de la calle de Mendizábal en el barrio de Argüelles en 1937. Obra fina que le valió que le consideraran digno sucesor de Goya. El grueso de su obra de grabador se encuentra en las pruebas que regaló a la Biblioteca Nacional, cuando era director Río y Rico, su amigo y compañero del Cuerpo de Archivos y allí se conservan en tres carpetas en la sala de estampas, catalogadas y en perfecto estado. El resto de pinturas y grabados se encuentran en la Calcografía Nacional, el Museo de Arte Moderno de Madrid, el Museo de Bilbao, el Museo de San Telmo de San Sebastián, el Museo de Vitoria, el Museo de Córdoba y en la Casa “Itzea”, de Vera de Bidasoa.

En cuanto a sus escritos, entre cuentos y novelas dejó más de veinte obras y gran cantidad de artículos, obteniendo un importante éxito con la novela La Nao Capitana, de 1935, con la que le concedieron el Premio Cervantes.

Y en cuanto a sus fantasías, sus veleidades científicas, estudio sobre la plasmogenia, sus inventos, fue amigo de Ricardo de La Cierva e inventó un estabilizador de vuelo y una vela de barco triangular, sus esculturas, como el busto de Fermín Leguía o la cabeza de Sarepia Oroz, sus ilustraciones en revistas, como Arte Joven o Alma Española,  o de novelas, como las suyas propias o las de su hermano Pío,  sus barcos, gustaba hacer maquetas a escala, sus aventuras de marino, viaje en el Elixir Dallen o de actor de cine en cintas como Zalacain, de Francisco Camacho  o en los filmes del bilbaíno Nemesio M. Sobrevila y de teatro, en El mirlo blanco, revolucionario comprometiéndose a pasar una ametralladora desde París. Arte, Cine y Ametralladora, facetas fascinantes que han resaltado todos los que han escrito sobre su figura.

Su obra queda marcada con un hierro rusiente de un monograma negro con la R de Ricardo invertida y pegada a la B de Baroja, como se ve en más de mil obras entre pinturas, dibujos y grabados.

Distintos grabados del artista

 

Obras de Teatro: El Cometa, estrenada en 1915 por la Compañía de María Guerrero. Camino, publicada en 1915. Marino Faliero, 1922, drama, primera versión. Olimpia de Toledo, impresa en 1923. El Pedigrée, impresa en 1924. Marinos vascos, estrenado en 1926. El maleficio, estrenado en 1926. El torneo, estrenado en 1926.

Obras de narrativa

Aventuras del submarino alemán U: Narración de un viaje en sumergible por el Mediterráneo y el Atlántico (1917). De tobillera a cocotte (1919). Fernanda (1920). Fiebre de amor (1921). Los tres retratos (1930). La nao Capitana: cuento español del mar antiguo (1935), Premio Cervantes de novela. La tribu del halcón: cuento prehistórico de actualidad y El coleccionista de relámpagos (1940). Bienandanzas y fortunas. Novela histórica (1941). Pasan y se van (1941). Clavijo: tres versiones de una vida, (1942). El Dorado (1942). Los dos hermanos piratas (cuento del mar Mediterráneo) (1944).

Obras de Ensayo: Conferencia La crítica de arte, 3 de abril de 1925. Prólogo a Goya, de Laurencio Matheron (1941). Gente del 98 (1952, reeditado en 1969 con el título Gente de la generación del 98). Recoge artículos publicados en la prensa madrileña en 1935. La plasmogenia, divagación pseudocientífica, s. a.

Filmografía: 1927 Al Hollywood Madrileño, Nemesio Sobrevila (director). Muda. 1928 Zalacaín el aventurero, Francisco Camacho (director). Muda; perdida. 1929 El sexto sentido, Nemesio Sobrevila (director). Muda. 1931 La incorregible, Leo Mitller (director). Sonora. 1947 La Nao Capitana, (adaptación de su propia novela), Florián Rey (director).

 

Ricardo Baroja y Nessi y la AEPE

Socio Fundador de la Asociación Española de Pintores y Escultores, fue Vocal de la Junta Directiva en 1914; miembro del comité de redacción de la Gaceta de Bellas Artes en 1930, colaboró con la institución siempre que así se lo pidieron.

Participó en un ciclo de conferencias que la AEPE llevó a cabo en el Aula de Historia del Arte de la Escuela de Bellas Artes de San Fernando, en 1944, pronunciando además numerosas conferencias acerca del arte y la pintura.

Socio de Honor en el Salón de Otoño de 1927, participó además en los siguientes:

Al I Salón de Otoño de 1920 presentó

769.- Costumbres de pueblo, aguafuerte, 0,36 x 0,45

Al VII Salón de Otoño de 1927 llevó las pinturas y grabados

230.- La calzada, óleo, 60 x 83; 231.- El puerto, óleo, 68 x 98; 512.- Viejo Londres, aguafuerte; 513.- Lanzahita, aguafuerte; 514.- Frailes traperos, aguafuerte; 515.- La churrería. El caminante, aguafuerte; 516.- Pasaje, aguafuerte; 517.- El paseo de los curas. Las calderas de asfalto, aguafuerte;  518.- La muerte. Conferencia. La Chata, aguafuerte; 519.- Mendigas. A misa mayor, aguafuerte; 520.- Pío Baroja. Las majas. El salto de la garrocha. Madrigal de la vera, aguafuerte; 521.- Un chicoleo. Paleto. Viático. Posada de madrigal, aguafuerte;

Al IX Salón de Otoño de 1929 concurrió con las pinturas

346.- El forastero, óleo, 0,84 x 1,13; 347.- La torada, óleo, 0,50 x 0,63; 348.- El Sena en París, óleo; 349.- La carretera, óleo; 350.- Los nihilistas, óleo; 351.- Casas blancas, óleo.

Al X Salón de Otoño de 1930 presentó

405.- Calle de Granada, óleo, 1,13 x 1,41; 406.- La estación, óleo, 0,97 x 1,17; 407.- El portillo, óleo, 1,11 x 0,97; 408.- Lancha pesquera, óleo, 0,78 x 1,07;  409.- El abeto, óleo, 0,90 x 0,64; 410.- Otoño, óleo, 1,00 x 0,62.

En el 50 Salón de Otoño de 1983, su obra Paisaje estuvo presente en la Sala Homenaje a los artistas que hicieron posible el I Salón de Otoño de 1920.

 

Las hermanas Sánchez Miñambres

Por Mª Dolores Barreda Pérez

 

LAS PRIMERAS ARTISTAS DE LA

ASOCIACION ESPAÑOLA DE PINTORES Y ESCULTORES

Desde su fundación en 1910, y después de haber tratado en anteriores números a las Socias Fundadoras de la entidad, y las participantes en el primer Salón de Otoño, vamos a ir recuperando de la memoria colectiva, el nombre de las primeras socias que vinieron a formar parte de la Asociación de Pintores y Escultores.

 

Indalecia, Segunda y María de los Ángeles Sánchez Miñambres,

conocidas como Inda, Dina y María

MIÑAMBRES DE MAS, Dina  P    1927  MADRID/LEON

 

Dina Sánchez Miñambres

 

Si bien sólo una de ellas perteneció a la AEPE, y dada la singular historia de las tres hermanas, decidí ahondar en sus vidas y rescatarlas del olvido.

Indalecia, Segunda y María de los Ángeles Sánchez Miñambres, conocidas como Inda, Dina y María

La saga familiar de las Sánchez Miñambres y su relación con el mundo del arte, se iniciará con su bisabuelo, Perfecto Sánchez Iváñez, arquitecto de finales del siglo XVIII y principios del XIX, que firmaba distintos planos, alzados, construcciones y dibujos arquitectónicos, muchos de los cuales se conservan en el inventario del Museo de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid.

Su abuelo, Fernando Sánchez Pretejo continuó los pasos de su progenitor y fue el notable arquitecto diocesano autor del cierre del atrio y las verjas de la Catedral de León.

Su padre, José Sánchez Puelles, rompiendo la tradición familiar, se convirtió en un prestigioso abogado pero cuya ocupación principal, terminó consistiendo en administrar el rico patrimonio familiar.

Su madre, Agustina Miñambres, era una mujer de gran belleza, nacida en la pedanía de Villibañe, perteneciente al municipio de Valdevimbre, en pleno Páramo leonés.

A través de su hermano, que también era abogado, Agustina conoció a al que sería su futuro esposo y padre de las tres niñas nacidas del matrimonio.

En 1886 en León, vinieron al mundo las gemelas Indalecia y Segunda, conocidas como Inda y Dina, ambas al contraer matrimonio se afincarían en Madrid. Su hermana, María de los Ángeles, conocida como María, nació en 1889 también en la misma capital.

Las vocaciones artísticas y culturales de las tres hermanas fueron fomentadas por sus padres, que contrataron a una institutriz francesa para educar a las niñas y se empeñaron, con indudable éxito, en que todas ellas dominaran con soltura un instrumento musical. Inda y Dina se centraron en el piano, mientras la pequeña María volcó todos sus afanes en la bandurria.

La familia alternaba su domicilio entre Madrid y León, compaginando largas estancias estivales en el caserío de Marzanas, en la localidad leonesa de Grulleros.

El 18 de junio de 1911 falleció el cabeza de familia, José Sánchez Puelles, quien había llegado a ser Diputado provincial, Concejal del Ayuntamiento de León y Secretario de la Sociedad de Seguros contra Incendios

INDA, la pintora, contrajo matrimonio en 1912 con el asturiano Luis Aza Díaz, ingeniero y subdirector de Renfe, que fuera hijo del comediógrafo y sainetero Vital Aza, celebrado autor de zarzuelas en las postrimerías del siglo XIX.

Del matrimonio nacería un único hijo, Vital Aza Sánchez, conocido como “Vitalón el cetrero”, que falleció en 1988.

Indalecia falleció en 1953.

Margarita

Maja, presentadas al 23 Salón de Otoño

A la verbena de San Antonio, con la que concurrió al 24 Salón de Otoño

María Luisa de Aza, con la que concurrió al 24 Salón de Otoño

DINA Sánchez Miñambres, inscrita como socia de la AEPE, contrajo matrimonio en 1910 con el Comandante de infantería Luis Más Mompeón, que falleció en 1930, y con el que tuvo dos hijos.

Escultora de gran talento, en su obra el arte regional leonés siempre tuvo gran peso específico.

En 1924 participó en el homenaje tributado en la capital de España a la escritora Emilia Pardo Bazán, presentando al concurso un original proyecto en forma de fuente con el rotundo busto de Emilia, realizado en colaboración con el arquitecto Manuel de Cárdenas y Pastor, quien fuera hermano del también arquitecto Ignacio de Cárdenas y Pastor, autor del Edificio de Telefónica de la Gran Vía de Madrid, y del abogado, jugador de fútbol y Presidente del Atlético de Madrid, Ramón de Cárdenas Pastor.

Ambos, realizaron un sorprendente y atrevido trabajo que mereció los calificativos de «notable revelación» y «genialidad» por parte de la crítica especializada.

En la revista semanal ilustrada Vida leonesa, del 1 de enero de 1925, aparece una página dedicada a Dina S. Miñambres de Más, como firmaba sus obras según la moda imperante de la época, en la que se reproduce su fotografía y dos de sus obras, acompañadas del siguiente texto: “Guiada de un fuerte temperamento artístico, impulsada por su exquisito gusto nuestra distinguida paisana, se decidió por el arte de más realeza; no se conformó con ser pintora y se dedicó de lleno a la escultura, en cuyo arte ha logrado bien pronto halagüeños éxitos que corresponden a su valer. Damos a nuestros lectores con el orgullo de ser los primeros en mostrarles estas primicias, varias obras de la señora Miñambres de Más: dos cabezas de niño, dos perfectísimos retratos de Luis Más y de Inda S. Miñambres, un admirable torso griego, y una reproducción de la sublime “Friné ante sus jueces” que por castigarlas sufrieron el castigo de su belleza que aniquiló sus furores y severidad. Dina Miñambres ha comenzado una vida artística en la que es seguro alcanzará los mayores éxitos, que nos halagarán a todos nosotros por ser ella leonesa”.

Participó en la Exposición Nacional de Bellas Artes de 1926, con dos esculturas tituladas “Mociña leonesa” (madera, 100 x 45) y “Cabeza de hombre” (bronce, 45 x 14), logrando que la crítica alabara sus obras con frases como …”Dina S. Miñambres, en quien se advierte una indudable influencia de Asorey, expone una talla en madera y un busto en bronce que hacen concebir grandes esperanzas”, y también “En escultura anotamos una talla policromada, «Mociña leonesa», de Dina S. Miñambres, que en la misma sala presenta «Cabeza de hombre» (bronce), dos obras bien logradas”.

En 1927 participó también en el VII Salón de Otoño, donde se inscribió como S. Miñambres, (doña Dina), natural de León, donde reside, Alfonso V, 9. Al mismo, presentando las obras:

506.- El tonto de Benamariel (escayola)

507.- Niño dormido (talla policromada).

El 11 de noviembre de 1961 inauguró una exposición en la Sala Martha de Madrid, situada en la calle Joaquín García Morato, 150, bajo la dirección de Manuel Sánchez Rodríguez, y con el decorador Antonio de Miguel, en la que compartía espacio con las pinturas de Moisés Colomo y las esculturas del socio de la AEPE José Pérez Sejo y José Valero.

En 1965 realizó una exposición que recogió el 22 de febrero el diario Pueblo, bajo el título de “Una curiosa exposición, con efectos musicales y muestras de ceremonias”. En el artículo firmado por Yale, se comentaba: “El periodista recibió un programa para asistir a una exposición de escultura. En el programa, que no tiene desperdicio, se establece que los “efectos musicales” corren a cargo de Alfonso C. Santisteban, que las señoritas maestras de ceremonia lucen creaciones de Matías Montero, que los peinados son una creación exclusiva de los hermanos Blanco y que la organización y relaciones públicas las lleva G. B. ¡Ah! La escultora se llama Dina S. Miñambres! Fui, naturalmente… Había diez esculturas, toda la producción de la expositora, una de las cuales representa a “El Cordobés” en actitud de brindar. La escultora se ha apresurado a presentar dos reproducciones: una en bronce y otra en madera. Además de eso, ha tallado un busto de su jefe de Relaciones Públicas, don Guillermo Blanco, “Un tiro certero”, “Infantes con gorro”, “Jenízaro”, “La esclava del amor” y una “Mocina leonesa”…. Comenzaron a llegar señoras… hasta una princesa, por quien la escultora doña Dina me dejó plantado en mitad de la entrevista. Menos mal que su hija me dio algunos datos. Por ejemplo, que doña Dina –que es una mujer muy anciana- comenzó a pintar a los 18 años. Luego, se hizo escultora. La familia se opuso siempre a que presentara su obra, pero ahora habían decidido probar suerte”.

Dina llegaría a cumplir los 100 años de edad, acontecimiento que celebró con una misa en la misma capilla catedralicia donde un siglo antes fue bautizada junto a su hermana gemela.

Su hija Margarita Más es una renombrada actriz teatral que hubo de esperar hasta 1998 para debutar en su tierra, con La vida que te di, un texto de Pirandello puesto en escena por el director Miguel Narros.

Dina falleció en 1986 en León.

 

Esculturas de Dina Miñambres

 

El tonto de Benamariel, de Dina Miñambres, presentada al VII Salón de Otoño

La exposición de Dina Sánchez Miñambres en Pueblo, 1965

 

MARÍA vivió con sus padres, acudiendo a estudiar al Instituto, decisión inusual en la época. En plena adolescencia, se cayó de un caballo, dejándola una cojera que formaría parte de su insólita personalidad.

Volcada en el arte, cofundadora junto a su amigo Miguel Canseco de la Cultural y Deportiva Leonesa, se instala en París para cursar estudios en la Sorbona. Aún se conservan los carnés de mademoiselle Miñambres, socia entusiasta del Foyer Internacional des Etudiantes y del Cercle-Bibliotèque de la Maison des Etudiantes , sito este último en el selecto Boulevard Raspail.

Envuelta en los círculos intelectuales parisinos, entabla una amistad más que estrecha con el entonces famoso escritor y periodista soviético de familia judía, Ilja Ehrenburg, un ruso de culto, cuyas obras ridiculizaban al Occidente capitalista y al sistema soviético.

Ehrenburg llegaría a pedir en matrimonio a María, que regresa a León para comunicar tan sensacional noticia a su madre.

La oposición de la familia hace que renuncie a ese amor para hacerse cargo de los negocios familiares.

María comenzó a colaborar por entonces en la prensa local, escribiendo para Vida Leonesa una sección que firmaba bajo el seudónimo de «María Antonieta», en la que «despreciando lo vano, adornando lo ideal, lucha con la bella ilusión de lo perfecto, hasta conseguir insensiblemente que en ella se forme el espíritu exquisito de la mujer inteligente y sensitiva».

El 19 de noviembre de 1925, María Sánchez Miñambres fue nombrada concejala en el Ayuntamiento leonés, siendo la primera mujer que accedió a un cargo de semejante categoría.

Sus nuevas responsabilidades políticas no la harían olvidar sus obligaciones empresariales y, decidida a sacar el mayor rendimiento posible a la finca de Marzanas, en 1928 dirigió un escrito al Director General de Agricultura y Montes exponiendo su intención de cursar los estudios de Perito Agrícola con carácter oficial, algo que no estaba previsto en el caso del personal femenino.

Sí que se contaba con ella para los más relevantes actos sociales vividos por entonces en León, como la visita oficial de los Reyes de España en el mes de octubre de 1927. María fue la encargada de agasajar con un ramo de flores a la reina Victoria Eugenia. También participó con entusiasmo en todo tipo de procesiones cívicas, banquetes y concursos, como el convocado en 1929 por la Asociación de Ganaderos de España, donde fue premiado el toro Montañés, propiedad de las Miñambres.

Afiliada a la derechista Unión Patriótica de Primo de Rivera, con algunas simpatías con la naciente Falange Española, como prueba un excepcional documento gráfico que muestra al líder nacional José Antonio acompañado por María y los primeros miembros del partido que se afiliaron en León.

Con el estallido de la Guerra Civil comenzaron las dificultades para María, siendo encarcelada en San Marcos e incautadas muchas de sus propiedades bajo el cargo de «ser afecta a la República». A pesar de no poder probar nada, sería condenada a pasar varios años en Saturrarán, un penal para mujeres sito en San Sebastián.

Mezclada con las presas comunes, quienes la conocían como «la señorita», María dio buena prueba de su temple personal y comenzó a realizar una importante labor social en el presidio, escribiendo las cartas que las reclusas, analfabetas en su gran mayoría, enviaban a sus familias. Incluso llegaría a entablar buena amistad con el director de la cárcel, dando clases particulares a su propio hijo.

Una vez puesta en libertad, regresaría a León para continuar con una vida sencilla, regida por el ciclo de las cosechas en Marzanas y la dirección de sus lucrativos negocios particulares, como su ganadería de vacas frisonas, premiada por el Ministerio de Agricultura con el título de «ganadería diplomada», el día 7 de febrero de 1969.

Se hizo además constructora y edificó un buen número de casas en los solares que la familia poseía en la entonces naciente barriada de San Claudio de León.

Rebosante de vitalidad hasta el final, pues aún conducía su coche por las calles leonesas con más de 80 años, nunca dejaría de lado sus inquietudes culturales, cediendo su casa de la calle Santa Cruz como local de ensayo para el naciente grupo teatral GRUTELIPO.

Así hasta el día 1 de abril de 1977, cuando falleció.

María Sánchez Miñambres fotografiada en los años  veinte y debajo, durante un acto en León

 

Dina Sánchez Miñambres y la AEPE

Participó en el VII Salón de Otoño de 1927, donde apareció inscrita como S. Miñambres (doña Dina), n. de León, donde reside, Alfonso V, 9. Al mismo presentó dos obras:

506.- El tonto de Benamariel, escayola

507.- Niño dormido, talla policromada

Presentó también obra al 12 Salón de Otoño de 1932, donde figuró inscrita como Miñambres de Puebles (Dª Dina), natural de Leva. Reside en Madrid, Lagasca, 48. Presentó la obra:

78.- Aldeana leonesa, escayola

Inda de Aza y la AEPE

Participó en el 23 Salón de Otoño de 1949 inscrita como De Aza, Inda, con dos obras, una inscrita en la sección de pintura y la otra en la de dibujo y grabajo:

195.- Maja

19.- Margarita, dibujo

Al 24 Salón de Otoño de 1950 presentó dos obras:

35.- María Luisa de Aza, dibujo

78.- A la verbena de San Antonio, óleo

En el 25 Salón de Otoño de 1952 presentó una obra:

43.- Salmón, óleo

Inaugurado el XVII Salón de Primavera de Valdepeñas

En el Museo Municipal de la capital del vino

El Museo Municipal de Valdepeñas acoge desde el 22 de junio al 16 de julio de 2023, la edición número 17 del Salón de Primavera «Por Tierras de Castilla La Mancha”, para el que se han seleccionado un total de 44 obras de entre más del centenar de las presentadas al certamen que organiza la Asociación Española de Pintores y Escultores.

Al acto de inauguración han asistido el Presidente de la Asociación Española de Pintores y Escultores, José Gabriel Astudillo, acompañado de las Vocales de la Junta Directiva, Alicia Sánchez Carmona,  Paloma Casado y Carmen Bonilla, además de la teniente de alcalde de Cultura Vanessa Irla, así como Vanessa Irla, Concejala del Ayuntamiento de Valdepeñas, que en su discruso, ha destacado la importancia de que instituciones y asociaciones aúnen sinergias para trabajar y fomentar la cultura. “Nos une ese interés, ese objetivo persistente y continuo en el tiempo por apoyar a los artistas, por darles un impulso para que puedan continuar con su carrera, especialmente los más jóvenes, que necesitan ese impulso, y también defender la labor que se realiza en el ámbito cultural por los artistas, que tan importante es”, ha manifestado. “Si unimos sinergias, nos irá mejor, como con este certamen”. “Es responsabilidad de cualquier institución promocionar y potenciar la cultura”.

Vanessa Irla y José Gabriel Astudillo, durante sus intervenciones

 

Ha añadido que el alcalde, Jesús Martín, siempre ha apostado por la cultura porque “la mejor carta de presentación de una ciudad es su apuesta por la cultura”. Irla ha señalado que la pandemia nos hizo darnos cuenta de la importancia del arte. “Tenemos que alimentarnos de alimentos y alimentar nuestra alma de arte. Con la pandemia los museos estaban vacíos y hay que llenar los museos de contenido y de espectadores, porque es el público el que da sentido a las obras”. También ha comentado que el artista valdepeñero Gregorio Prieto formó parte de la Asociación Española de Pintores y Escultores, y por último, ha felicitado a los premiados, a las menciones de honor y a los participantes en el certamen.

Por su parte, el presidente de la Asociación Española de Pintores y Escultores, José Gabriel Astudillo, ha puesto en valor el hecho de seguir exponiendo en Valdepeñas, así como que la ciudad organice la Exposición Internacional de Artes Plásticas, que celebra este año su 84 edición. “Para nosotros es un privilegio seguir manteniendo este certamen porque Valdepeñas es una ciudad importante. Su certamen es uno de los más antiguos de España, al igual que la Asociación Española de Pintores y Escultores es la más antigua, cumpliendo 113 años como asociación”.

Ha manifestado que el “Ayuntamiento de Valdepeñas y la asociación trabajan por amor al arte para que los artistas puedan exponer en esta muestra”.

En el mismo acto de inauguración se llevó a cabo la lectura del acta del jurado y la entrega de premios. El Jurado ha estado formado por José Gabriel Astudillo, Presidente de la AEPE y Mª Dolores Barreda Pérez, Secretaria General de la AEPE, actuando como Presidente y Secretaria del Jurado, respectivamente, ambos con voz y sin voto,  y como Vocales del Jurado, Alicia Sánchez Carmona, Fernando de Marta y Jesús Alcolea. Como viene siendo habitual, se invitó a un socio elegido al azar a formar parte del jurado, y en esta ocasión fue Alejandro Gutiérrez Chamorro el elegido.

Según recuerda José Gabriel Astudillo, Presidente de la Asociación Española de Pintores y Escultores, el interés de la AEPE por apoyar el Salón de Primavera de Valdepeñas llevó hace unos años a la creación expresa de los galardones, la Medalla de Pintura José Moreno Carbonero y la Medalla de Escultura Lorenzo y Federico Coullaut Valera, ambos socios fundadores y destacados artistas a quienes se rinde así homenaje, además de las Menciones de Honor que el Jurado haya considerado oportunas.

Tras la presentación de la exposición por parte del Presidente de la AEPE y la teniente de alcalde de Cultura, se procedió a la lectura del acta del jurado, que otorgó los siguientes premios:

MEDALLA DE PINTURA JOSÉ MORENO CARBONERO

Daniel Mass Lorenzo. Necrópolis. Acuarela / papel. 80 x 110

 

MEDALLA DE ESCULTURA COULLAUT VALERA (LORENZO Y FEDERICO)

Pilar Vich. Terceto al viento. Talla en madera, madera patinada y hierro. 75 x 65 x 23 / 60 x 56 x 25 / 56 x 55 x 26

 

MENCIÓN DE HONOR

Héctor Acevedo. Carnaval. Mixta / lienzo. 150 x 150

 

MENCIÓN DE HONOR

Joaquín Besoy. Luz de primavera. Óleo / lienzo. 65 x 81

 

MENCIÓN DE HONOR

Carmen Bellido. Perseverancia. Bronce patinado. 30 x 12 x 16

 

MENCIÓN DE HONOR

Gabriella Bevilacqua. El Ada de los ruidos del pensamiento. Mixta (hierro, acero inox y resina). 70 x 60 x 54

 

MENCIÓN DE HONOR

César González García. Toledo desde El Mirador. Óleo / lino. 90 x 150

 

El presidente de la AEPE, José Gabriel Astudillo, ha felicitado al Ayuntamiento de Valdepeñas «que apuesta firme y decididamente por el arte actual y sobre todo por apoyar a la Asociación y hacer posible la realización de este certamen en una tierra que debería contar con la distinción de “Denominación Artística Protegida».

 

 

Los artistas seleccionados en esta ocasión de entre el más de un centenar de obras presentadas al concurso, para integrar la exposición del XVII Salón de Primavera, son: Héctor Acevedo (Héctor Adolfo Acevedo Rojas) – Joaquín Alarcón (Joaquín Alarcón González) – Leila Alonso (Leila Alonso García) – Arellano (Francisco José Franco Ramírez de Arellano – Jimena Aznar (Jimena Aznar Rodríguez-Pardo) – Beatriz de Bartolomé (Beatriz de Bartolomé Díez) – Mª Carmen Bellido (Mª Carmen Bellido Márquez) – Joaquín Besoy (Joaquín Besoy Posada) – Gabriella Bevilacqua (Gabriella Bevilacqua Sanz) – Carmen Bonilla (Carmen Bonilla Carrasco) – Martina Cantero (Martina Cantero Jiménez) – Paloma Casado (Paloma Casado López) -José Manuel Chamorro (José Manuel Chamorro Chamorro) – Fiona Olimpia (Laura Fiona Cunilles Mula) – Enrique Delgado (Enrique Delgado Contreras) – Federico Echevarría (Federico Echevarría Sainz) – Magdalena España (Magdalena España Luque) – Carmelo Esteban (Carmelo Esteban Gracia) – Rosa Mª Fernández (Rosa Mª Fernández Fernández) – Federico García Zamarbide – J Pedro Gómez (Pedro Gómez Gómez) – César González García (César González García) – Juan Antonio González Sáiz – Juanchi (Juan Antonio González Sáiz) – Ana Gutiérrez (Ana Gutiérrez Mengual) – Marien de Haro (Marien de Haro Moreno) – Sofía Cristina Jiménez Sánchez – Andrii Kovalyk – Javier Langa (Francisco Javier Langa Canseco) – Leodegario (Fernando Peña Corchado) – Sagrario López Amador – Esther López Valls – Daniel Mass Lorenzo – Mena (Rafael Gómez  Mena) – Rafael Luis Moreno Flores – Laura Moret (Laura Moret Escrig) – José Antonio de la Peña (José Antonio de la Peña García-Gadea) – Riccardo Rossi – Ángel Rueda (Ángel Rueda Rodríguez) – Chari Salcedo (Rosario Salcedo Martínez) – Cristina Sánchez (Mª Cristina Sánchez Estévez) – Juanjo Sánchez (Juan José Sánchez Fernández) – Antonio Téllez de Peralta – Pilar Vich (Mª Pilar Vich Pérez)

La exposición muestra los últimos trabajos de más de sesenta artistas, la mayoría de ellos pertenecientes a la Asociación Española de Pintores y Escultores, que han ido encontrando un lugar destacado dentro de la plástica contemporánea española. Cada uno de ellos representa a generaciones diferentes, pero unidos bajo el común denominador del lenguaje contemporáneo que se mueve entre la figuración, la abstracción y la vanguardia.

Toda la información, catálogo digital, galería de obras y el acto de inauguración puedes seguirlo en esta misma web, pestaña Certámenes y Premios, subpestaña, Salón de Valdepeñas.

XVII Salón de Primavera de Valdepeñas

«Por tierras de Castilla La Mancha»

Del 22 de junio a 16 de julio de 2023

Museo Municipal de Valdepeñas
Calle Real, 42
13300 Valdepeñas, Ciudad Real

Martes: de 17 a 20 h. X, J,V y S: de 10’30 a 14 y de 17 a 20 h. Domingos de 11 a 14 h.

 

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